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Salvar las empresas para salvar el empleo

Salvar las empresas para salvar el empleo

Por Joan Carles Valero
martes 21 de abril de 2015, 16:19h
Falta coordinación para unificar ordenanzas y que cualquier actividad económica tenga facilidades de movilidad (traslados) como de nueva implantación. En L’Hospitalet y el Baix han desaparecido 4.279 empresas desde el año 2008, lo que supone el 14% de la actividad empresarial anterior al inicio de la crisis.
Muchos municipios de nuestro territorio han puesto en marcha medidas para favorecer la actividad empresarial, como por ejemplo congelaciones o bonificaciones de impuestos, subvenciones y exenciones sobre diferentes tasas.

Los empresarios han aplaudido algunas de estas iniciativas, pero también recuerdan la importancia de que estas condiciones ventajosas sean aplicables, no solo a los emprendedores y nuevas empresas, sino, sobre todo a las compañías que ya existen. En definitiva, los ayuntamientos que el próximo 24 de mayo se constituirán deben de comprometerse con medidas concretas para ayudar a la sostenibilidad del tejido empresarial en la comarca, lo que supone garantizar el empleo.

Pérdida de casi 5.000 empresas
La campaña “Salvem les Empreses”, que ha recibido cerca de 80.000 apoyos, persigue recuperar el valor social de la actividad empresarial que representan las empresas, verdaderas impulsoras de la economía, porque las empresas son nuestra riqueza. Sobre todo cuando en L’Hospitalet y el Baix Llobregat han desaparecido 4.279 empresas desde el año 2008, lo que supone el 14% de la actividad empresarial anterior al inicio de la crisis.

En el primer año de la campaña, se consiguió la implicación de la sociedad y mejoras concretas en diferentes municipios, gracias al apoyo de ciudadanos, empresarios, entidades empresariales, sindicatos y un importante número de administraciones locales, todos trabajando juntos para evitar la destrucción de empresas, crear puestos de trabajo y cambiar el marco de desarrollo para hacer favorable la actividad económica.

Ayudas solo para las nuevas
Las ayudas se concentran a los que empiezan, pero las empresas ya existentes están sufriendo desde hace unos cuantos años una situación muy difícil y, a diferencia de las de nueva creación, cuentan en muchos casos con negocios consolidados, y con experiencia, y necesitan un empuje para seguir adelante y no cerrar. Son las que se han adherido a la iniciativa Salvem les Empreses y piden apoyo y ayuda.

Los ayuntamientos que surjan de las urnas en el mes de mayo, en el momento de aprobar las ordenanzas deberían incluir iniciativas que impliquen ventajas fiscales concretas para las empresas ya instaladas en nuestro territorio. Unas ventajas que deberían estar condicionadas por ejemplo a la contratación de personas en paro. También las empresas, ahora más que nunca, necesitan poder maniobrar y adecuarse a los cambios de forma rápida, eficiente y económica.

Unificar ordenanzas
Para facilitar la movilidad, una reivindicación importante de la campaña y de las empresas en general es la unificación, por parte de todos los municipios del Baix Llobregat y L’Hospitalet de los permisos y regulaciones requeridos para ejercer las diversas actividades empresariales, con el fin de facilitar al máximo la movilidad. Este reto supone la coordinación de los ayuntamientos, algo que ya ocurre en otros ámbitos de la actividad, como transportes, residuos, etcétera. Es cuestión de voluntad política y de priorizar el empleo como el verdadero reto colectivo en esta nueva etapa que empezamos en mayo.

Facilidades de movilidad
Otro reto mucho más fácil es facilitar la movilidad dentro de un mismo municipio, lo que supone que las empresas ubicadas en una población que se trasladen sin salir de la misma localidad han de poder hacerlo con las máximas facilidades y los mínimos costes. Se debe tener en cuenta que ya estaban trabajando, y no pueden tener el mismo trato que si iniciasen una actividad.

El reto parte de concienciar a la sociedad de la importancia de las empresas y detener su cierre. Las empresas son necesarias para la vida de las personas, para el desarrollo de la sociedad, para la existencia de los estados. De ahí que hay que volver a que se valore a las empresas por lo que aportan a la sociedad, que se reconozca la labor y el riesgo del empresario.

Cambios solicitados
En definitiva, lo que se reclama desde el mundo empresarial es un cambio en el marco de desarrollo de su actividad. Un cambio que pase porque el funcionamiento de las administraciones públicas, empezando por la municipal, esté al servicio de las empresas y que se fomente la competitividad, la innovación, la exportación y la formación como pilares básicos del desarrollo de las empresas. Un cambio que propicie volver a prestigiar al empresario y, por tanto que se promuevan las nuevas vocaciones empresariales.

En cuanto a la operativa, que se reduzcan y simplifiquen los trámites, los permisos y los impuestos; que los costes energéticos y de comunicaciones sean similares a los de nuestros competidores. Y en el campo de la formación, que la Formación Profesional esté enfocada al mundo del trabajo y que se facilite la entrada a las empresas de los jóvenes sin experiencia que quieran aprender. III
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