Analizando en los últimos años los datos del paro, las cifras desprenden cierto optimismo en términos generales. La curva es decreciente y, por tanto, positiva, aunque sea con índices de temporalidad de hasta el 90% aproximadamente.
Si entramos a analizar las franjas de edades, observamos cómo hay un colectivo que continúa inmerso en la crisis y que de optimismo nada. Son los parados mayores de 45 años, los cuales no consiguen reincorporarse en el mercado laboral pese a la experiencia que les avala de décadas de trabajo.
Para dar visibilidad a este colectivo nació la Asociación de Parados Mayores de 50 años, Assat 50. La entidad, que emerge en L’Hospitalet, ha conseguido poner en la agenda política esta problemática gracias al congreso específico que recientemente han celebrado por segunda vez consecutiva en la ciudad. Figuras destacadas como el ex ministro Valeriano Gómez o el actual Síndic de Greuges, Rafael Ribó, han pasado por el escenario del Auditori Barradas para ofrecer sus conclusiones y sus tendencias para favorecer la ocupación de este colectivo.
Gracias a su labor, algunos ayuntamientos están tomando medidas para favorecer la ocupación de los parados mayores de 45 años con programas específicos para ellos. También el sindicato UGT se sumó a esta lucha presentando la moción Garantía +55, que fue aprobada en todos los ayuntamientos del territorio, así como en el Consell Comarcal. “Esperamos desaparecer algún día”, decía María Hilda, presidenta de Assat50, durante la gala de los Premios El Llobregat. “Querrá decir que estamos todos trabajando”. Pero mientras esto no ocurra, que haya por mucho tiempo asociaciones como esta. III
Si (
No(
