El servicio de cercanías de Barcelona será, durante este mes estival, más delgado de lo habitual. La Generalitat de Catalunya ha decidido suprimir, desde el 4 de agosto y hasta el 5 de septiembre, cerca de 80 circulaciones diarias en tres líneas de montaña de ‘Rodalies’ en adecuación con el descenso de pasajeros de estas líneas. Son las líneas R2 Norte (Aeroport – Maçanet-Massanes), R3 (L’Hospitalet de Llobregat – Puigcerdà) y R4 (Sant Vicenç de Calders – Manresa). Si las tres líneas pasan, en algún punto, por el Baix Llobregat, la R4 es la que tiene más presencia ya que une la comarca desde Martorell hasta L’Hospitalet de Llobregat.
En contra de esta decisión, el sindicato CGT ha querido denunciar la eliminación de estas circulaciones por la falta de maquinistas, un problema que, según el sindicato, sufre desde principios de año Renfe y Adif. CGT culpa a Renfe, al Ministerio de Fomento y, en general, al Gobierno del Partido Popular de llevar a cabo “una pésima política empresarial, encaminada a la liberalización y privatización del servicio ferroviario, siempre negociada y avalada por los sindicatos afines al régimen (Semaf, UGT y CCOO) que recientemente han firmado Despidos Colectivos en el ferrocarril sin garantizar tasas de reposición”, recoge el comunicado. Crítico discurso del sindicato, que ya se movilizó a principios de julio en contra del deterioro de las empresas públicas.
Por lo que se refiere al servicio de cercanías, el conseller de Territori i Sostenibilitat, Santi Vila, reconoció la semana pasada, en una queja directa al Ministerio de Fomento, estar fracasando en la estrategia de ofrecer un servicio de calidad en la ciudad de Barcelona.
12 de agosto de 2014||
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