Manuel Gallardo, el metal flexible de UGT en Seat

Manolo, como era conocido en el sindicato, murió el 13 de diciembre a los 72 años. Los periodistas de Barcelona todavía recuerdan el día en que se jubiló, hace siete años. En la sede central de UGT se convocó una rueda de prensa de despedida. La cita fue por la mañana, pero nadie comió ese mediodía porque el encuentro acabó en pantagruélica fiesta gastronómica, gracias a la comida que cocinó su esposa para compartir con la familia periodística.

Nacido en Écija (Sevilla), Manolo Gallardo se incorporó a Seat cuando tenía 30 años, en plena agitación sindical y política durante los últimos años del franquismo. Tres años después, en 1975, se afilió a UGT y entró en la ejecutiva de la sección sindical en Seat. Accedió a la presidencia del comité de empresa en 1983, cargo que ejerció hasta 1998, cuando dio el salto como número uno de la Federación del Metal del sindicato en Cataluña.

Pionero
Durante su trayectoria tuvo que hacer frente a la dura crisis de Seat de principios de los 90 y a la oleada de cierres y deslocalizaciones industriales que se produjo en Cataluña en la década pasada. Fue pionero en la modernización de las relaciones laborales en Seat y en el metal con la aplicación de fórmulas innovadoras, como los contratos de relevo y de jubilación parcial. Él mismo se convirtió en un jubilado parcial en sus últimos años como trabajador en Seat, ya que un mes al año era sustituido por un joven con contrato de relevo de un veterano. El resto de grandes fabricantes de automóviles siguió sus pasos e implantó la misma fórmula. También fue uno delos impulsores de la presencia de Seat en el comité europeo y mundial de Volkswagen y uno de los artífices de la fusión de las federaciones del metal, de la construcción y de otras ramas productivas. III