La movilidad eléctrica gana terreno poco a poco en la metrópolis, con la finalidad de impulsar un movimiento sostenible y reducir la contaminación del aire que causa el tráfico rodado de la ciudad.
El acuerdo se ha realizado por Antonio Poveda, vicepresidente de Movilidad y Transporte de AMB y Joan Rodríguez, director de Marketing de Torrot. Convenios como este “facilitan el camino hacia un verdadero cambio de hábitos. Las administraciones, en este caso, tenemos que dar ejemplo con nuestro parque móvil. La contaminación atmosférica y la calidad del aire son cuestiones de salud pública” ha afirmado Poveda.
La empresa Torrot cede a AMB, hasta diciembre de 2017, con posible derogación de un año más, tres motocicletas eléctricas, dos de policías y una estándar. Así pues, los ayuntamientos del Área metropolitana de Barcelona que lo soliciten podrán utilizar estos vehículos 100% eléctricos e interconectados, en sus desplazamientos institucionales.
Por otro lado, la entidad supramunicipal prevé abrir una línea de subvenciones para la adquisición de motos eléctricas por parte de los ayuntamientos. El objetivo no es otro que continuar impulsando la movilidad de cero emisiones.