La estructura y fisonomía de las ciudades se adapta a pasos agigantados a la revolución de la economía 4.0 y a las nuevas generaciones que la impulsan. Una revolución que pivota sobre la tecnología y la cultura de compartirlo todo, desde el coche a la oficina y también la vivienda. En Londres, el 20% de los edificios de oficinas ya son de “coworking”, es decir, no tienen inquilinos, sino usuarios. Igual ocurre con las viviendas de los “millennials”, generación que opta por el concepto de “coliving” y que reclaman menos parkings en los edificios y más conectividad y comunidad. Igual ocurre con la logística de la distribución del e-commerce, que requiere naves en la primera corona de las ciudades para así abastecer más rápido las mercancías a los clientes.
En este panorama cambiante, el salón inmobiliario Barcelona Meeting Point (BMP) calienta motores. Aunque el principal salón español del sector se celebrará del 25 al 28 de octubre en el recinto ferial de Barcelona de Montjuîc, este jueves el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB), organizador del certamen, ha presentado las líneas maestras de la edición número 22, con la constitución de un comité de innovación. De entrada, el delegado especial del Gobierno en el CZFB, Jordi Cornet, ha adelantado que el BMP apostará por la internacionalización del sector inmobiliario y la generación 'millennial'.
Para Cornet, el salón debe servir también para reivindicar la capitalidad de Barcelona también en el sector inmobiliario, después de liderar los sectores de la tecnología móvil y náutica, por ejemplo. De esta forma, asegura que se reforzará el protagonismo español como uno de los principales países europeos receptor de inversores extranjeras. En ese sentico, Cornet remarca que BMP debe contribuir a "retornar a Barcelona la marca como ciudad referente inmobiliaria", así como exponer propuestas y soluciones que garanticen que el sector crezca de manera sostenible y accesible para toda la ciudadanía.
Apuesta por la vivienda de alquiler
En la apuesta por el CZFB de facilitar viviendas de alquiler a precios accesibles, Cornet ha avanzado que la empresa pública que preside está “a punto” de entregar las primeras 54 viviendas que promueve en el barrio Marina de la Zona Franca, a las que seguirán las de los guardias civiles para realojarles porque vivían en los cuarteles de Sant Andreu.
BMP confía en superar las cifras del año pasado, en pleno octubre, cuando registró 16.000 visitantes profesionales, 265 empresas participantes, 17 sesiones de conferencias con 90 ponentes a pesar de los difíciles momentos que atravesaba la ciudad y el país debido al desafío independentista. Este año, con la seguridad garantizada, los organizadores esperan superar los participantes, también de representantes de fondos de inversión, procedentes, sobre todo, de Estados Unidos y Reino Unido.
El salón también organizará un 'Symposium Internacional', en el que se abordará los retos que tiene el sector inmobiliario, como son la digestión de la transformación está registrando, para 'ayudar' así a repensar sus principales productos (oficinas, residencias y hoteles) ante los cambios en los hábitos de consumo de sus usuarios por el impacto de la tecnología.
Diseño barcelonés del salón
El salón ha redefinido la estructura del espacio interno inspirándose en el barrio del Eixample, simulando las islas que configuran su plano, de modo que no habrá un pasillo central como ocurre en otras ferias. La directora general del CBZF, Blanca Sorigué, ha explicado que aspiran a "visualizar Barcelona" para demostrar la fuerza que tiene la ciudad en el sector inmobiliario, por lo que los stands se organizarán como las islas de del barrio Eixample.
Sorigué ha agregado que este nuevo diseño -con una entrada única y dos salidas, y dos espacios separados para la zona del Symposium y la de 'Proptech', y que ha sumado 1.000 metros cuadrados más, ha sido pensado también siguiendo la organización de un centro comercial. El salón inmobiliario también tendrá un espacio en la playa, por lo que la directora general de BMP y del CZFB ha señalado que algunas de las sesiones del salón se celebrarán en la costa barcelonesa, con la intención de reforzar esa proximidad con la ciudad y el mar.