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El Parc Agrari contará con un centro de producción de biofertilizantes pionero en Europa
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El Parc Agrari contará con un centro de producción de biofertilizantes pionero en Europa

martes 17 de noviembre de 2020, 13:47h
La actual planta de transferencia de residuos de Viladecans se transformará en una moderna instalación especializada en la recuperación de nutrientes de la fracción orgánica de la basura doméstica metropolitana y su conversión en abonos de uso agrícola. El equipamiento empezará a funcionar a finales del año 2023.

La actual planta de transferencia de residuos de Viladecans tendrá un futuro agrícola. La instalación, ubicada en pleno corazón del Parc Agrari del Baix Llobregat- se va a especializar en la producción de biofertilizantes y abonos, recuperando los nutrientes que están presentes en fracción orgánica de los residuos metropolitanos. El proyecto, recién aprobado por el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), costará 53,5 millones de euros y su construcción podría iniciarse a mediados del año 2022 y acabarse a finales del 2023.

El futuro equipamiento, que se conocerá como Centro de Producción de Biofertilitzantes y Abonos (CEBA), tendrá como principal función abastecer de fertilizantes naturales a los cultivos del Delta del Llobregat a la vez que se impulsa una economía local basada “en la alimentación sostenible”, han explicado fuentes metropolitanas. El FORM, por su nivel de recuperación de nutrientes, será “una experiencia pionera a toda Europa”, han asegurado las mismas fuentes.

El vicepresidente de Ecología del AMB, Eloi Badia, ha destacado que la planta de biofertilizantes “es una apuesta por la economía verde y circular, capaz de convertir los residuos en recursos y a la vez de impulsar sectores estratégicos de futuro, como el de la alimentación sana, sostenible y de proximidad”.

475 kilos por persona

La enorme generación de residuos es un serio problema al que debe hacer frente el AMB. En 2019, los municipios dela metrópoli barcelonesa generaron 1,52 millones de toneladas de basura, lo que equivale a 475 kilos por habitante. Lo triste es que “solo el 20% de estos residuos acabó en un depósito controlado”, según cifras de la administración metropolitana.

Actualmente, la recogida selectiva metropolitana de residuos se ha estancado en el 37,4% y el objetivo es que en año 2025 la cifra alcance el 55% de reciclaje en 2025. Para conseguirlo, se trabaja con que dentro de cinco años la fracción y la basura no reciclable se recojan puerta a puerta o mediante contenedores inteligentes.

Producción de electricidad

Para lograr este objetivo será imprescindible que el CEBA funcione a pleno rendimiento y sea capaz de transformar la materia orgánica recogida de forma selectiva en los hogares metropolitanos en nutrientes para los campos de cultivo. Además, el centro recuperará biogás (metano), que se utilizará para dotar de electricidad a la propia planta de tratamiento, que también se alimentará de energía fotovoltaica.

En total, se calcula que pasarán por el centro de producción de Viladecans unas 90.000 toneladas de residuos orgánicos al año.

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