La ciudad recupera la conexión en tren con Sant Sadurní, tras meses en obras, lo que normaliza la circulación por la vía férrea de la línea R4 de Rodalies y de los convoys de mercancías que desde el pasado verano eran desviados por la línea de la costa. Un nuevo túnel permitirá llevar el ancho europeo hasta la frontera francesa.
El hito del corredor ferroviario del Mediterráneo ha ganado varios enteros con la finalización de los trabajos estratégicos en el túnel de Martorell –una infraestructura estratégica para el proyecto- y otras mejoras en la línea R4 de Rodalies hasta Sant Vicenç de Calders (Baix Penedès). La finalización de los trabajos, ejecutados por el gestor de infraestructuras ferroviarias ADIF, ha permitido recuperar la normalidad en la línea de cercanías y las conexiones en tren de la ciudad con Sant Sadurní d’Anoia i els Monjos (Alt Penedès) y también el tráfico de mercancías por la línea de Villafranca que desde el pasado mes de julio era desviado por la línea de la costa.
Lo más destacado de las obras en el túnel de Martorell (de 1.065 metros de longitud) es que se ha rebajado dos metros y se ha adecuado su estructura a las especificaciones técnicas europeas con el fin de poder implantar el tercer carril y adaptarlo al ancho estándar (1.435 mm). También se han construido una nueva contrabóveda, una nueva salida de emergencia y se ha renovado la catenaria desde la estación hasta la bifurcación de Seat.
Las obras se han aprovechado para renovar las vías 1 y 2 de la estación de Seat-Martorell, la adecuación del túnel de acceso a la factoría de la compañía del Grupo Volkwagen, y la ejecución de los desvíos de servicios de la autopista AP-7 para permitir la apertura de un nuevo cajón ferroviario que permita segregar el tráfico de la vía madre hasta la vecina localidad de Castelldefels.
Túnel de Costablanca
Justamente ahora se está trabajando en el tramo que conecta ambas ciudades, cuya principal intervención es la restauración del antiguo túnel de Costablanca (de 810 metros de longitud y actualmente sin servicio), para incorporarlo a la red de explotación y crear una tercera férrea hasta el viaducto del Llobregat.
Las actuaciones en el tramo Castellbisbal-Martorell, y por extensión hasta el Nudo de Vila-seca (Tarragona), suponen una inversión de 64.144.929,48 euros, de los cuales 25 millones de euros, aproximadamente, se han ejecutado en estos últimos cinco meses de obras. Los trabajos son fundamentales porque, entre otros beneficios, conectarán la red ferroviaria española a la europea, desde Algeciras (Cádiz) a la frontera francesa.
Más competitividad
El corredor mediterráneo hará todavía más competitivo el tejido industrial del área de Martorell, una zona en la que están ubicadas empresas de gran potencial que podrán exportar e importar sus productos por ferrocarril, aumentando de paso la sostenibilidad medioambiental.
Una vez finalicen el conjunto de las obras, servirá para unir la parte del Corredor Mediterráneo que ya está acabada y en servicio (entre el puerto de Barcelona y Castellbisbal y la frontera francesa) con la parte del Corredor que se encuentra en ejecución, al sur del mismo (entre Castellbisbal y Algeciras), que está avanzando en el resto de obras y proyectos. También permitirá que la red española pase a formar parte de la red europea.
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