Además de la moratoria hotelera, la siguiente decisión de Ada Colau y su formación Barcelona Comú (BeC) nada más llegar la alcaldía de la capital catalana fue rechazar la pista de hielo temporal que durante cuatro Navidades se había instalado en la plaza Cataluña durante las fiestas bajo el nombre “Bargelona”.
La iniciativa la impulsó el alcalde Xavier Trias y estaba sufragada por los comerciantes de los principales ejes de Barcelona, junto a un incremento de la iluminación navideña como medidas de dinamización del consumo en la ciudad.
Colau decidió no renovar esta iniciativa por considerarla poco “sostenible” y poco “coherente” con una ciudad mediterránea. Al igual que en el caso de los hoteles, el Ayuntamiento de L’Hospitalet se ha propuesto como alternativa y ha conseguido que la pista de hielo, sufragada a través de la Fundació Barcelona Comerç, se monte este año en el recinto ferial de La Farga, del viernes 27 de noviembre al domingo 10 de enero.
En un comunicado conjunto, los promotores de la pista de hielo y el Ayuntamiento de l’Hospitalet aseguran que la instalación permitirá crear 200 puestos de trabajo temporal, y que se ampliará respecto a las dimensiones que venía ocupando en Barcelona. La alcaldesa de l’Hospitalet, la socialista Nuria Marín, ha explicado que la iniciativa permitirá “dinamizar” la zona, además de suponer ingresos directos para las arcas municipales, por el alquiler del espacio. También ha apuntado que su consistorio se aprestará a acoger otras iniciativas similares que rechace Barcelona.III
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