“Cuando ves esas reacciones tan extrañas y violentas en tu hijo o hija por el móvil te das cuenta que es mono, adicción. Y con esto estamos para ayudarla”
Un móvil es, actualmente, nuestro teléfono, pero, también, es nuestro despertador, agenda, calendario, GPS; es cámara de fotos y a la vez sirve de álbum de fotos; de radio o reproductor de música; sirve de acceso a la información, a los contenidos en directo o a la carta; es una herramienta de trabajo; podemos ir al mercado de manera online; hace de plaza del siglo XXI para hablar con familia, amigos y conocidos e, incluso, se ha extendido el uso de aplicaciones para ligar o conocer gente. Al final, de hecho, el teléfono es lo que menos importa.
Apéndice humano
El móvil se ha convertido, así, en una especie de apéndice del cuerpo humano; y si no observen algunos de los datos del Informe Mobile en España y en el Mundo de Ditrendia: en el mundo hay ya, por primera vez, más terminales móviles (7.300 millones) que personas (7.200 millones); el promedio de uso ha superado, también de manera inédita, al de la televisión (177 minutos al día de media con el móvil frente a los 168 viendo la caja ‘chica’; en España el 87% de las personas con móvil tiene un ‘smartphone’; y, del total, se aprecia un aumento de la dependencia con un 40% que mira el móvil más de 50 veces al día y un 70% que lo hace en la primera hora después de despertar. Por todo, la gestión y el control del uso del móvil parece cada vez un debate más destacado, sobre todo, si hay niños y adolescentes por el medio.
Padres emprendedores
Un matrimonio de Collbató ha desarrollado la aplicación ‘Parenty Control’, precisamente, para poder administrar el uso del móvil de sus hijos tras apreciar síntomas de adicción. “La app nace de la necesidad como padres de dos adolescentes que están enganchados al móvil, lo que lleva a discusiones en casa y a un distanciamiento”, explica Montse Hernández, directora de Soluciones 5 y creadora junto a Francisco Robles de la aplicación. “Como creadores de apps siempre estamos buscando ideas y buscando proyectos. Y sufriendo el tema en nuestras propias carnes, se nos ocurrió crear esta aplicación para que a nuestra hija se le bloqueara el móvil, por ejemplo, antes de la hora de dormir, durante las horas de colegio o a la hora de hacer los deberes”, comenta Robles.
Y así fue. Si en noviembre o diciembre tuvieron la idea, en marzo empezaron a tener la aplicación que, a día de hoy, cuenta con más de 1.300 descargas a la semana. La aplicación se instala tanto en el terminal del padre como en la del hijo y se vinculan de tal manera que el terminal de los padres elige las aplicaciones que se bloquean por franjas horarias. Automáticamente, si el hijo/a abre esa aplicación en el horario restringido necesitará un código que, obviamente, gestiona el padre. De esta manera, se quiere ayudar a superar la adicción al móvil evitando su uso en los momentos que no procede y, sobre todo, de una manera no intrusiva y que cuenta con la colaboración del hijo/a. “La manera de funcionar no es que se lo impongamos sin que se entere, lo que puede llevar a una ruptura total [de las relaciones]. Hablamos con ella y le hicimos entender que tiene un problema. Y con esto estamos para ayudarla”, comenta el también técnico de la aplicación. “Me había convertido en su policía, en su sombra, y no puede ser. De esta manera, luchas con las mismas armas y en el mismo territorio”, matiza Hernández.
La adicción de los adolescentes no es una broma como demuestra el índice de descargas y el interés en la aplicación de países como Estados Unidos, que registra el 30% de las descargas, además de España, Francia o Alemania. Por ello, según este matrimonio, es importante ser didácticos desde un principio y enseñar unas pautas y unos comportamientos de uso: “He visto y conocido el mono al móvil; la he visto temblar. Siempre lo vemos desde afuera y pensamos que no nos va a tocar. Pero cuando te toca, cuando ves a tu hija que tiene esas reacciones que nunca habías visto por no tener el móvil, tan extrañas, tan violentas, con unas contestaciones… Es cuando te das cuenta de la adicción y el problema”. III
Si (
No(
