Era uno de los pactos de gobierno locales que, tal y como había avanzado El Llobregat, más preocupaba a la federación comarcal socialista. Y, finalmente, ha caído. El PDeCAT de Molins de Rei, el partido del alcalde del municipio, Joan Ramon Casals, ha decidido romper con su hasta ahora socio de gobierno, el PSC, y poner punto y final a más de seis años de sociovergencia.
Así lo ha avanzado Casals en una entrevista en Ràdio Molins: “Tras analizarlo en la ejecutiva del PDeCAT y en consultas con los militantes, y después de que el viernes el PSOE apoyara el 155 y viendo todo lo que vendrá en los próximos meses, el pacto no puede continuar. Yo estoy en una legalidad de República catalana atacada por un Estado represor que va contra la voluntad del pueblo de Cataluña y mis socios actuales defienden todo lo contrario”.
El edil ya había avanzado que existía esta posibilidad y que el acuerdo se sometería a la valoración de la Ejecutiva. De hecho, el también diputado en el Parlament de Catalunya ha sido uno de los más activos en defender la construcción de la nueva República; incluso el mismo jueves 26 de octubre amagando con dimitir como diputado de Junts pel Sí si el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, convocaba elecciones y no accedía al pleno para declarar la independencia, como finalmente ocurrió.
De esta manera, el PDeCAT local queda en minoría con solo 6 concejales de 21 totales y, por tanto, tendrá que buscar nuevos apoyos para contar con un gobierno local estable en lo que queda de mandato. Unos apoyos que podría obtener, llevados por la política nacional, gracias a la CUP (4) o ERC (3). Molins Camina (1), Iniciativa (1) y un concejal no adscrito completan el arco político municipal.
Hoy, a las 11 horas, se formalizará la ruptura del pacto de gobierno –acordado, por primera vez, en 2011 y reeditado en 2015- y se anunciarán las nuevas responsabilidades municipales.
Precipitación
La ruptura del pacto de gobierno ya ha contado con la reacción del PSC de Molins y su líder, Xavi Paz, que ha calificado la decisión de “precipitación”. En declaraciones a El Llobregat, Paz considera que “no había ningún motivo, a nivel local, que motivara la ruptura del pacto de gobierno, que reeditó ya en 2015. Se ha precipitado en una decisión que mete a Molins de Rei en una importante inestabilidad y, más, en un momento clave para el mandato”.
Los dos escenarios son, como decimos, el de gobernar en minoría con seis concejales o el de pactar un nuevo acuerdo. Según Paz, podría haber ya un preacuerdo con ERC, un nuevo pacto que, a falta de 18 meses de acabar el mandato, "es una irresponsabilidad por la falta de experiencia de estos partidos ahora en la oposición".
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