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El éxito y la saturación del ‘Passeig de les Aigües’ amenaza la convivencia entre peatones y ciclistas
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El éxito y la saturación del ‘Passeig de les Aigües’ amenaza la convivencia entre peatones y ciclistas

miércoles 21 de marzo de 2018, 17:57h
Más de 5.500 personas pasan cada domingo por el tramo sur del paseo, entre la plaza Mireia y la carretera de la Rabassada
El éxito y la saturación del ‘Passeig de les Aigües’ amenaza la convivencia entre peatones y ciclistas
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Un estudio conjunto del Consorcio del Parc de Collserola y el RACC refleja los actuales problemas de saturación que sufre el ‘Passeig de les Aigües’ que, pese a que recibe un nivel de satisfacción elevado por parte de los usuarios, cuenta con problemas de convivencia, sobre todo, entre los peatones y los ciclistas.

Bajo el título ‘Estudio de Convivencia entre Usuarios del Passeig de les Aigües’, el informe cifra en 2,3 millones las visitas anuales a este recorrido, fundamentalmente, en fin de semana. Se calcula que unas 5.500 personas pasan un domingo habitual por el tramo sur del paseo, el que va desde la carretera de la Rabassada hasta la plaza Mireia. Son, de hecho, el 73% de los usuarios, mientras que al lado norte solo acude el 27%.

Este nivel de afluencia, además de la sensación de aglomeración en el espacio natural, provoca conflictos entre usuarios con dos colectivos claros: por un lado, los peatones y corredores y, por otro, los ciclistas. En este sentido, las conclusiones del estudio recogen, entre los aspectos peor valorados, la convivencia entre viandantes y los usuarios que practican ciclismo de descenso, una modalidad deportiva que consiste en bajar la montaña por caminos estrechos y con fuertes pendientes, una práctica prohibida en la actual ordenanza del parque. Y es que los ciclistas de esta modalidad, habitualmente, se cruzan con el paseo en dirección perpendicular y a altas velocidades, lo que resulta un peligro para el resto de usuarios sean peatones, corredores u otros ciclistas del paseo. A la vez, suponen una degradación de la vegetación del parque y una afectación de su fauna.

Para poner fin a esto, el estudio ha diseñado una nueva señalización para divulgar las buenas prácticas y una mejor convivencia entre los usuarios. En concreto, consta de distintos plafones con planos, normas y consejos de civismo que estarán ubicados en los accesos principales y en puntos estratégicos del recorrido.

Notable satisfacción

En relación con las notas, el nivel de satisfacción es de 8,5 sobre 10, por tanto, un notable que roza el excelente, como decimos, pese a estos problemas de convivencia detectados. Todos los aspectos reciben, en cualquier caso, el aprobado siendo la vigilancia (6,2) y la convivencia entre viandantes y ciclistas de descenso (6,8) las peores notas. En positivo, se valora muy positivamente los accesos a pie (8,6) y la convivencia entre viandantes y corredores (8,2).

Para mejorar estos números, los usuarios proponen hacer campañas de concienciación, mejorar la señalización para los ciclistas y peatones, incrementar el control sobre los comportamientos incívicos y no permitir el ciclismo de descenso.

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