La bicicleta ha hecho en los últimos años una autentica metamorfosis que la convierte ya no solo en un vehículo lúdico para hacer deporte, sino también en un medio de transporte. Con este cambio de usos y de cultura, son muchas las ciudades que están dando importantes pasos para adaptar sus vías públicas a este medio.
En este sentido, Sant Boi ha presentado una amplia estrategia local para lograr que la bicicleta sea también un medio “cotidiano” en la ciudad. En concreto, el objetivo es, según ha anunciado la alcaldesa de Sant Boi, Lluïsa Moret, lograr que los desplazamientos totales en este transporte pasen del 1% actual al 5%.
Para ello, el documento señala cinco grandes ejes de trabajo para fomentar el uso de la bicicleta: mejorar la infraestructura ciclista, que cuenta actualmente con 77 kilómetros de vías ciclables; incentivo de la formación; buenos hábitos de deportes y salud; desarrollo económico local y Comunicación y Sensibilización.
Sant Boi prevé, según el plan, ampliar la red de carriles bici en la ciudad, además de mejorar el mantenimiento y la limpieza de los ya existentes, garantizando también espacios de aparcamiento seguros. En este sentido, el documento recoge mejoras en la señalización de las calles secundarias que desde el año 2008 han sido “pacificadas” con las denominadas ‘Zonas 30’, que, con la velocidad restringida, mejora la convivencia y compatibilidad entre la bicicleta y los vehículos de motor.
Por otro lado, la ciudad impulsará, en el apartado de formación, el proyecto ‘Ningún niño o niña sin saber pedalear”, con el que se enseñará a los más pequeños a saber ir en bicicleta. “La bicicleta es el centro del trabajo que estamos haciendo para avanzar hacia una movilidad sostenible, saludable y segura”, ha dicho Moret. Estrategia que encaja perfectamente en la estrategia global de ciudad de convertirse en un referente sostenible en el ámbito metropolitano.
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