Por ley la comercializadora pública produce el 80% de la energía para las instituciones que la forman, como el Ayuntamiento de Barcelona, pero el 20% de su producción puede ser dedicada a terceros, como los ciudadanos, lo que supondría abastecer unas 20.000 casas de la metrópolis.
El Área Metropolitana de Barcelona (AMB) se conecta a Barcelona Energía. El Consejo Metropolitano ha aprobado hoy extender a los 35 municipios restantes de la conurbación el servicio que esta eléctrica pública ya daba en Barcelona. "Desconectamos de los oligopolios y nos conectamos a las renovables, al autoconsumo y a la soberanía energética", celebraba en las redes sociales Ada Colau, alcaldesa de la capital catalana y presidenta del AMB.
El Ayuntamiento de Barcelona se viene abasteciendo de la energía producida por esta empresa desde julio, y ahora el servicio se hace extensivo a los municipios del área metropolitana. No obstante, según una normativa europea, tan solo podrá dedicar un 20% de su producción a abastecer a casas particulares, ya que el 80% restante se comercializará a las instituciones públicas que la forman. Sea como sea, en poco tiempo se empezará con la campaña de captación de clientes a pie de calle, que según estimaciones del ente supramunicipal podrían llegar a 20.000 casas.
La empresa extenderá sus servicios a las instalaciones del AMB y a las empresas gestoras de servicios del ente a partir de 2019.
El gran impulsor de la iniciativa, el vicepresidente de Medio Ambiente del AMB, Eloi Badia, ha asegurado que con la extensión de Barcelona Energía a toda el área metropolitana, se está "consolidando un instrumento" que permitirá "avanzar en la transición energética, en un cambio de modelo basado en las renovables locales, en la eficiencia, en el que la ciudadanía esté en el centro de las decisiones".
La principal apuesta de Barcelona Energía radica en la generación de energías renovables y en la promoción del autoconsumo, además de combatir la pobreza energética, recuperar ese sector económico y, de esta manera, dejar de depender de las grandes compañías eléctricas. En este sentido, Badia ha remarcado que Barcelona Energía "es una comercializadora gestionada desde el ámbito público que no persigue los beneficios económicos sino el beneficio común".
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