El experimento se llevará a cabo en Collblanc-Torrassa durante lo que queda de mes. Se penalizarán con multas que van de los 80 a los 200 euros a los usuarios que circulen de manera negligente, ir en contra dirección, lleven una segunda persona a bordo, usen móvil o cascos o vayan bebidos.
Según han informado fuentes municipales, desde hoy y hasta el 31 de enero la Guardia Urbana controlará la circulación de patinetes eléctricos en Collblanc-Torrassa. Se trata de una prueba piloto que se pone en marcha ante la constatación de las problemáticas ocasionadas por estos nuevos vehículos. De hecho, el regidor informa que en 2019 los patinetes eléctricos estuvieron involucrados en más de 50 accidentes.
El objetivo de la iniciativa es aplicar las normas e instrucciones emitidas recientemente por la Dirección General de Tráfico (DGT) sobre el uso de estos vehículos de movilidad personal, que ha proliferado en los últimos tiempos por nuestras ciudades como alternativa al coche.
Por todo ello, la Guardia Urbana sancionará a todo aquel que circule de manera irregular, ya sea por la acera como por la calzada, o en contra dirección, los que nos respeten la preferencia de paso, los que usen móvil o auriculares mientras lo conducen, los que viajen con otra persona a bordo o vayan bajo los efectos de las drogas. Las multas pueden ir de los 80 a los 200 euros, y en el caso de los menores de edad, la responsabilidad recaerá sobre los progenitores.
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