El hotel medicalizado de Sant Andreu de la Barca se ha desmantelado sin ni siquiera entrar en servicio y el hospital de campaña que la Guardia Civil montó en el polideportivo municipal sigue sin ponerse en marcha, porque sigue faltando la autorización de la Conselleria de Salut. Pero la ciudad no se rinde y va a seguir intentando que el equipamiento se ponga en marcha o, como mínimo, que quede claro que no se abre por falta de voluntad política por parte de la Generalitat de Cataluña.
Los argumentos de la consellera de Salut, Alba Vergés, para negar la mayor al hospital de campaña -falta de coordinación y de diálogo con el ayuntamiento- caen por su propio peso. El alcalde de Sant Andreu de la Barca, Enric Llorca, ha confirmado que se han cursado todos los trámites oportunos en un caso de estas características y que siguen “esperando una respuesta de la Conselleria de Salut desde hace 20 días”.
“Hablar de falta de diálogo o de coordinación y es mentir”, ha matizado Llorca, quien ha declarado persona non grata a la consellera Vergés, a al director del Servei Català de la Salut (SCS), Adrià Comella, y al responsable del SCS en la zona, Joan Puigdollers, pese a no contar con el apoyo de Ciudadanos (su socio en el gobierno municipal) ni de su propio partido (el PSC), que no demasiado partidario de este tipo de iniciativas. Pero el alcalde se mantiene firme en sus argumentos: “Hay una serie de personas que no han tenido sensibilidad de establecer una vía de dialogo para poder dar respuesta a las necesidades que los ciudadanos de Sant Andreu han tenido y siguen teniendo”.
Negativa a firmar
Enric Llorca no se resigna a que el hospital de campaña corra la misma suerte que el hotel medicalizado y por eso ha decidido que el polideportivo municipal siga alojando las 140 camas que ayudó a colocar Médicos Sin Fronteras y sigue esperando ese permiso que no llega. Como ocurrió con el hotel medicalizado. “Salut no nos ha han querido firma el contrato con el hotel medicalizado cuando solo faltaba eso para que pudiera entrar en funcionamiento. Y no ha sido por un problema técnico, porque hemos facilitado todo lo que se nos ha requerido y el hotel medicalizado cumplía con todo”, ha recordado el primer edil.
Llorca, que es médico de profesión, asegura que cuando comience la fase de tests masivos de Covid-19 para acabar con la pandemia “y se identifique a los casos positivos, hará falta un lugar para aislar a los enfermos”, porque volver a mandarlos a su casa como se está haciendo ahora en el municipio “sería actuar en contra de los que marcan todos los parámetros científicos”, porque se ha demostrado que la mayor vía de contagio del coronavirus “es entre miembros de una misma familia”, ha recalcado el alcalde de Sant Andreu.
Los test brillan por su ausencia
Tanto el hotel medicalizado como el hospital de campaña de Sant Andreu podrían ser dos equipamientos sanitarios de primera línea en los que ingresar a los pacientes positivos de coronavirus que requieran confinamiento y aislamiento. Así, los dos espacios “eran necesarios, son necesarios y serán necesarios en la fase de test masivos”, recalca Llorca. Y hablando de tests, el alcalde ha lamentado que en Sant Andreu “brillan por su ausencia. No se ha testado a nadie. No podemos hacerle pruebas de anticuerpos ni PCRs a nadie”, ha denunciado.
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