La mejor forma de que te pillen después de cometer un presunto delito no es dejar huellas y pruebas evidentes de tu autoría, es delatarte a ti mismo. Pues eso es lo que hizo exactamente el autor de un vídeo de TikTok en el que se enseñaba a sacar productos gratis de las máquinas de vénding del aeropuerto Josep Tarradellas de Barcelona-El Prat que ha acabado en manos de la Guardia Civil. El autor de la grabación, un joven de 18 años, ha sido identificado por los agentes y está siendo investigado por un presunto delito de hurto.
El autor del tutorial sobre como sustraerles bebidas a las máquinas de vénding de El Prat es un empleado de la empresa encargada del mantenimiento de los propios dispensadores. El ilustrativo video ha sido retirado de la plataforma TikTok cuando empezaba a hacerse viral.
A los Agentes de la Oficina de Análisis e Investigación de Seguridad de la Aviación Civil (ODAISA), con base en el aeropuerto Josep Tarradellas, no les ha costado mucho identificar quién era el autor del tutorial para robar. Al revés, lo ha tenido facilísimo. Blanco y en botella.
Pruebas grabadas
Y eso que el problema no es que grabara el tutorial para enseñar a robar (aunque podría ser moralmente reprobable). El quid de la cuestión es que, al grabarse a si para dar ejemplo de cómo se sustraen los productos, el empleado de la empresa de mantenimiento (posiblemente ya ex-empleado) está robando en una de las máquinas, dejando pruebas evidentes de su delito.
La actuación de los agentes de la Guardia Civil ha sido rápida y efectiva. Aunque el sospechoso ya ha borrado el vídeo de la su cuenta en la plataforma de TikTok (evitando que se viralizara) aún quedan pruebas de su existencia, como una captura de pantalla difundida en televisión. La empresa de máquinas de vénding ya ha corregido el fallo en el sistema de seguridad revelado por el autor del video para evitar que los visores del tutorial prueben a seguir las instrucciones y se dediquen al hurto masivo en los dispensadores de bebidas.
¿Sigue circulando?
Es importante recordar que TikTok permite guardar los archivos –aunque sean de otro autor- por lo que se desconoce cuántas copias puede haber del tutorial y cuánto tiempo permanecerá el vídeo en circulación, pues también se puede difundir a través de otras redes más difíciles de monitorizar como los grupos de WhatsApp. Lo que sí que parece claro es que el joven investigado va a tener difícil encontrar un nuevo trabajo después de esta experiencia.
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