Los manifestantes no pudieron entregar un manifiesto con sus reivindicaciones a las autoridades y utilizaron motosierras en sus protestas
Decía Machado, que Madrid es el rompeolas de todas las Españas y allá frente al Palacio del Ministerio de Agricultura; unas 200 personas, diez tractores y camionetas, se concentran el 15.7 bajo el sol, mientras en el interior el ministro se reúne con todos los consejeros autonómicos de agricultura para proceder al reparto de los fondos de la PAC-UE de 34.124 M. En el interior hay desacuerdos sobre el presumible recorte presupuestario entre las 17 autonomías. Las más radicales: Andalucía, Castillas y Aragón.
Afuera, sobre las 12h, los curiosos paseantes, preguntan a los manifestantes, muy sorprendidos por el gran despliegue policial, de vehículos antidisturbios y por sus movimientos para impedir la proximidad a la imponente puerta del Palacio de Fomento, hoy Agricultura.
No habrá posibilidad de entrega del manifiesto de protesta o siquiera una entrevista con algún directivo del Ministerio, solo el silencio indiferente de los políticos que “negocian el nuevo reparto de fondos” y en la que se define de “agricultor profesional” solo al que obtenga el 25% de sus ingresos de la actividad agraria.
Chalecos verdes y banderolas
Los silbatos, los chalecos verdes y las banderolas de protesta, dan paso al ‘aserramiento’ con varias motosierras de dos viejos olivos asolados por el pasado temporal “Filomena”, el ruido de las aserradoras, se superpone a la música de Morricone, “La muerte tenía un precio”, es una protesta original para “explicar” la ruina total del sector olivarero y de la almendra toledanos y que puede tardar de 5 a 8 años para reconstruirse. No ha habido seguros, ni ayudas específicas para compensarles.
Encima de un camión con los olivos ya aserrados, un dirigente de la “Unión de Uniones”, el Sindicato progresista de los campesinos, arenga sobre el doble lenguaje político, que se evidencia en hablar de la España vacía y el continuar provocando el éxodo humano, -hacia las grandes ciudades-, por su falta de criterio y rigor, en las negociaciones con la UE y su descuido frente a las exportaciones de terceros países, con bajos niveles sanitarios y medioambientales. Diversos oradores, incidirán sobre el bajo precio de la uva entre 15 y 23 céntimos. Este apartado motivará la máxima atención y apoyo de las delegaciones de Unió de Pagesos del Penedés y Baix -Nord Llobregat que contribuirán al servicio de orden. La uva en el Penedés, esta por los suelos, a donde muchos racimos irán en esta vendimia, porque la reducción de producción pactada se vulneró con la autorización de nuevas plantaciones. En setiembre la ira latente, bien fermentada por la desatención de las grandes bodegas, estallará a buen seguro.
El nuevo relato
El acto es un rodaje, un pre-estreno de las anunciadas protestas campesinas en relación al reparto final de los Fondos de la Política Agraria Común (PAC) para el 2021-2027 y que suponen una reducción del 10% respecto al último periodo. Será un ajuste a la baja, en periodo Covid-19, y con una larga lista de ministros y consejeros que son en su mayor parte legos en el tema y desconocedores de un sector con muchas aristas y detalles. La Polémica de la “Carne”. Tractores, banderas, manifestantes y hasta motosierras para un -nuevo relato- para los “medias”, a cargo de actores ya preparados para el estreno de la nueva temporada: PAC -2021-2027.
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