Catalina, dos espacios gastronómicos en Gavà Mar para cada día y eventos

Después de reinventar el concepto de cenas de empresa con encuentros virtuales, karaokes online y comidas a domicilio durante las pasadas navidades, en plena crisis sanitaria, en cambio para este año vuelven a celebrarse las tradicionales cenas de empresa y familiares. Los restaurantes del Baix calientan fogones para prepararse para recibir los eventos de grupos que suelen empezar ya a partir de finales de noviembre hasta llegar a los últimos días antes de Navidad. El deseo de normalidad y la sensación de volver a la vida de antes de la pandemia será la clave del éxito de esta temporada para los establecimientos que disponen de grandes aforos.
Una de las mejores opciones para un evento corporativo o familiar con glamur y apartada del bullicio de la gran ciudad, es celebrar la cena o comida de empresa en Catalina, en Gavà Mar, regentado desde este verano por el chef Óscar Manresa, que ha recuperado y mejorado el magnífico espacio natural antaño ocupado por Las Marinas, al haberse adjudicado la licitación de la concesión municipal de esta magnífica parte del pinar de nuestro litoral.

Todo es doble y junto al mar
Óscar ofrece 24.000 metros cuadrados de jardines en pleno pinar junto al mar con un restaurante abierto a la naturaleza, y ultimado las obras de mejora de los espacios colindantes para las celebraciones de bodas y todo tipo de eventos, tanto familiares como de empresa. Manresa comenta que a mediados de noviembre se estrenarán las instalaciones, empezando con un salón para 180 personas sentadas y la oferta de menús cerrados con el producto de calidad y elaboración que caracterizan sus restaurantes.
Todo en este espacio privilegiado es doble: doble cocina, dobles salones para comer, dobles espacios de terrazas, doble aparcamiento. Y todo conviviendo de forma independiente, pero disfrutando de la brisa y las vistas de la playa de dunas de Gavà y del microclima del pinar, que mantiene una temperatura primaveral incluso en el mes de diciembre. Como el año pasado y buena parte de este año no han podido celebrarse banquetes de bodas, la demanda de parejas se concentra ahora y durante el año 2022. “Tenemos más de 350 peticiones de información de parejas para celebrar su boda, de las cuales, ya han hecho algunas visitas”, comenta el chef.

Ambiente único para ocasiones…
Con el espacio de eventos de Catalina, se pueden llevar a cabo fiestas en un ambiente único que sorprenderá a los invitados. Cada rincón guarda originalidad y una arquitectura singular que lo convierte en un concepto revolucionario que hace de los acontecimientos algo fuera de serie. Sus pinos, ladrillos expuestos y la fusión de colores de la casona se convierten en el centro de atención por su excentricidad y misticismo.
La decoración de los acontecimientos puede ser de cualquier estilo. El lugar dispone de zonas especiales que se pueden usar para ejercerlos como bar, salón, comedor, pista de baile, habitación de la novia (en el caso de bodas) y un increíble túnel de luces en el que se puede montar una mesa imperial para un centenar de comensales o celebrar un cóctel para 200 personas. El salón interior permite 300 personas en formato banquete, mientras que en formato cóctel son el doble, 600 personas. El espacio se puede habilitar para menos comensales, ya que permite compartimentarlo mediante puertas correderas. En cuanto a la terraza, dispone de una superficie de banquetes para 300 personas y en formato cóctel 700 personas.

…y también para cada día
Óscar Manresa se ha pasado el verano entre Catalina y Kauai, centrándose en Gavà para darle más impulso al nuevo establecimiento. En el restaurante de a diario Catalina lo mejor es empezar con un picoteo, en el que no hay que olvidar pedir el tartar de tomate, sandía y fresas (16 €). Para dos o tres personas, muy recomendable el chuletón, raza Frisona, de 45 días de maduración (60 €) hecho a la brasa, o la espalda rellena de molleja, setas de temporada y trufa, también para dos o tres personas (58 €). Los arroces son todos muy buenos, como el de calamar y rape (22 €) o el negro de bacalao y kokotxas (21 €).