Tras luchas y reuniones entre los empresarios agrícolas del Baix Llobregat y el gobierno catalán, todo apunta que este último ha decidido jugar las cartas por su cuenta, tras la nueva propuesta de ampliación de la zona ZEPA, sin informar al grupo de empresarios.
Alrededor de ochenta empresarios agrícolas de las cooperativas de Viladecans y Gavà, junto con el apoyo del Instiut Agrícola Català de Sant Isidre, se han reunido para preparar las alegaciones a esta nueva propuesta de ampliación a 2.300 hectáreas de la zona protegida ZEPA, emitida por el gobierno de la Generalitat de Cataluña. En este sentido, se denuncia una falta de transparencia con el sector que se ve afectado por la ampliación y un rigor técnico mínimo inexistente. En la reunión los agricultores de municipios como Sant Boi, El Prat y L’Hospitalet, entre los de las cooperativas, han podido observar gracias a la exposición de mapas de las afectaciones que la medida conllevaría en sus campos, independientemente de si son propiedades o alquileres.
El conjunto de empresarios resalta la falta de consenso previo y señala que la propuesta que se ha presentado no tiene como base un criterio científico y técnico contrastado. La ampliación de la ZEPA supondría restricciones en los fitosanitarios y el riego, retirada de la vegetación invasora o daños en la fauna, entre otras consecuencias que afectan de manera directa a los agricultores de la zona.
Los empresarios de la comarca aseguran que la puesta en marcha de esta ampliación supondría la eliminación del Hub Agroalimentario del Baix Llobregat y significaría un gran paso atrás para el desarrollo del Baix Llobregat y del conjunto del Área Metropolitana de Barcelona.
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