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El absentismo laboral castiga la competitividad de las empresas del Baix y L'Hospitalet

El absentismo laboral castiga la competitividad de las empresas del Baix y L'Hospitalet

jueves 06 de octubre de 2022, 12:17h

La patronal AEBALL defiende que el trabajo en equipo, la flexibilidad horaria, el teletrabajo, la conciliación y la mejora de la comunicación pueden evitar que las compañias del territorio pierdan hasta un 5,5% de horas de producción al año por falta de personal

El absentismo laboral va al alza, lo que repercute directamente en una caída de la competitividad y la productividad, también en las empresas del Baix Llobregat. Se calcula que anualmente las mercantiles deben asumir la pérdida (o no realización) de un 5,5% del total de horas de trabajo efectivo pactadas con las plantillas. Con la intención de ponerle freno, la Asociación Empresarial de L'Hospitalet y el Baix Llobregat (AEBALL-UPMBALL) ha organizado esta semana una jornada técnica sobre esta problemática, que “provoca efectos negativos en la estabilidad y proyección de las empresas”, según la entidad. De este foro han surgido algunas propuestas de solución, que pasan por una mejora del vínculo entre el empleado y el empleador.

La jornada de la AEBALL, denominada ‘Gestión del absentismo: Herramientas y soluciones’ ha pivotado entorno al experto Xavier Pladevall (CEO de Acción Preventiva), quien ha destacado que detrás del absentismo laboral hay un desapego entre trabajador y empresa que vas más allá de un problema puntual de salud. De hecho, según los últimos datos recopilados por Randstad, el 26,4% de las personas que durante el tercer trimestre de 2021 no acudieron a sus puestos de trabajo (es decir, una de cada cuatro) se ausentaron “sin disponer de una baja laboral”.

Estos absentistas sin justificante médico adujeron otros motivos –algunos peregrinos- como, por ejemplo, “falta de motivación laboral, clima de trabajo hostil, cargas excesivas de trabajo, falta de organización en cuanto a las tareas a realizar, elevado riesgo de sufrir accidentes laborales, insatisfacción laboral, ausencia de estímulos, nula proyección profesional o falta de conciliación familiar”, señala el informe de Randstad.

Motor a medio gas

Según Xavier Pladevall "el motor de cualquier negocio son sus trabajadores y no se puede permitir que el motor se estropee o funcione a medio gas". Para empezar porque provoca pérdidas millonarias a las compañías, cifradas en unos 85.000 millones de euros anuales en toda España.

La resolución del absentismo endémico pasa por que se produzca un acercamiento entre las partes. "El talento es un bien escaso y, cuando una organización no sabe alinear los intereses de la empresa con las necesidades de desarrollo profesional y personal de un colaborador, se genera una falta de compromiso. Lo que se traducirá en una baja productividad, así como en un alto índice de rotación de personal”, ha defendido Pladevall. Por tanto, es necesario “fomentar la cultura del trabajo en equipo, ya que el sentimiento de pertenencia ayuda a que el empleado se sienta más comprometido con la empresa" y acuda a su puesto de trabajo.

Flexibilidad y teletrabajo

Otras posibles soluciones pasan por “apostar por la flexibilidad horaria, implementar el teletrabajo siempre que sea posible, mejorar la comunicación con las personas trabajadoras, potenciar la escucha activa, trabajar el liderazgo, invertir en la formación de los directivos y mandos intermedios, externalizar parte de los procesos productivos e invertir en responsabilidad social corporativa”, entre otros aspectos, como ha sugerido el CEO de Acción Preventiva.

Un portavoz de AEBALL ha destacado que para los empresarios de L’Hospitalet y el Baix Llobregat “es importante prevenir y acabar con el absentismo laboral en las empresas para ayudar a aumentar la productividad laboral, mejorar la competitividad empresarial y rentabilizar la inversión preventiva”. Además, “crear un entorno laboral más seguro y saludable se traduciría en la reducción de las tasas de accidentabilidad laboral, del número de bajas laborales y de sus costes”, han añadido las mismas fuentes.

Tensiones y fuga de talento

La asociación empresarial ha coincido con Xavier Pladevall en concluir que en este siglo XXI “el liderazgo es emocional”. Por lo tanto, “hay que trabajar las emociones, porque ésta es la variable discriminativa de la gestión del cambio, si no habrá tensiones internas y fuga de talento", han vaticinado los expertos.

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