Unió de Pagesos se opone a la autorización de la línea de muy alta tensión (MATE) entre Teruel y Begues por sus consecuencias para la agricultura y el medio ambiente. Han presentado un recurso de alzada y propondrán a la Generalitat y a las administraciones locales que se unan. El plazo para presentar recursos termina el 2 de septiembre. El proyecto busca transportar energía fotovoltaica y ha sido condicionado por la Generalitat en materia de biodiversidad.
La autorización de la línea de muy alta tensión (MATE) entre Teruel y Begues (Baix Llobregat) es objeto de oposición por parte de Unió de Pagesos. Con el fin de proteger el sector agrario y el medio ambiente, el sindicato agrario ha presentado un recurso de alzada a la Secretaría de Estado de Energía contra este proyecto que afectará a 40 municipios catalanes. Según Unió de Pagesos, la autorización de la MATE se ha llevado a cabo sin tener en cuenta las consecuencias para la agricultura y sin cumplir con los requisitos legales. Por tanto, propondrán a la Generalitat y a las administraciones locales que se unan a su recurso.
El próximo 2 de septiembre acaba el plazo para presentar recursos de alzada a la línea de 400 kV, a la que se oponen los campesinos. Esta línea tiene que recorrer más de 182 km atravesando el Ebro, Tarragona, el Penedès y el Baix Llobregat y su objetivo es transportar energía fotovoltaica.
A principios de agosto, el informe favorable de la Generalitat en materia de biodiversidad se convirtió en una condición para el proyecto, según afirmó David Mascort, consejero de Acción Climática. Además, el consejero señaló que el Ministerio de Transición Energética estaba ejerciendo "presión" sobre la Generalitat para que aprobara el proyecto y criticó al Estado. Noemí Llauradó, presidenta de la Diputación de Tarragona, también se opuso al proyecto y advirtió sobre su impacto paisajístico "elevado".
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