www.elllobregat.com

Antecedentes del nuevo curso

Por Fernando Martín
miércoles 23 de julio de 2014, 13:48h
El nuevo curso presenta una serie de variables, de importancia fundamental en el ámbito de los servicios públicos, determinados por la evolución de la economía a escala nacional e internacional.

La reciente aprobación por parte del Banco Central Europeo de una línea de crédito, basada en la compra ilimitada de deuda soberana a corto plazo, constituye un aspecto relevante en su política económica. No obstante, dicha compra exige condiciones macroeconómicas al país solicitante. Se intuye que las reformas estructurales acometidas en nuestro país, con anterioridad, habrían de resultar suficientes para optar a la misma y, por tanto, la máxima Entidad monetaria europea no debería obligar a efectuar nuevos recortes en materias sensibles, como pensiones o prestaciones por desempleo.

Como se ha demostrado, medidas sugeridas pero no ejecutadas desde el BCE, como una simple declaración de intenciones, han supuesto un descenso de la prima de riesgo y, por ende, de la rentabilidad del bono español a diez años. Ahora se precisa actuar, no simplemente anunciar, con objeto de ofrecer confianza a los mercados financieros que especulan e impiden atajar la crisis de deuda soberana.

Asimismo, nuestros socios europeos instan a concluir el proceso de reestructuración del sistema financiero español, con eficacia y a la mayor brevedad posible. La creación del llamado “banco malo”, destinado a gestionar los activos tóxicos de las entidades financieras, persigue esa finalidad, y su funcionamiento previsto para el próximo mes de noviembre no debería retrasarse lo más mínimo.

En cuanto a la repercusión de los recortes, ya materializados en materias de sanidad y educación por valor de 10.000 millones de euros, la apertura del curso tendrá una evidente repercusión negativa en el estado de bienestar social.

Así, en educación y a pesar del notable incremento del número de estudiantes, a los recortes de personal docente, se añaden otros factores como la eliminación de becas por diferentes conceptos y, en general, una reducción presupuestaria cifrada en 3.000 millones de euros que, no permitirá en absoluto mejorar la calidad del sistema educativo, puesto que con menos recursos humanos y materiales para mayor población estudiantil, difícilmente se podrá mejorar la tasa de fracaso y abandono escolar próxima al 30 por ciento, el doble de la exigida desde los países de nuestro entorno. En ese sentido, los profesores sostienen que supondrá pérdidas considerables en apoyos y refuerzos, desdobles, recursos pedagógicos y aulas de acogida.

Por otra parte, los recortes de 7.000 millones de euros en sanidad, con medidas colaterales como el copago farmacéutico y el euro por receta, además de la revisión de la cartera de servicios básica para imponer el repago en algunas prestaciones, pueden tensionar esta nueva etapa y amenazan la sostenibilidad de la sanidad pública. Asimismo, los sanitarios sostienen que la retirada de la tarjeta a los inmigrantes irregulares impedirá la atención sanitaria en patologías crónicas, lo que provocará complicaciones que requerirán la utilización de la vía de urgencias hospitalarias, incrementando con ello la presión asistencial y, en consecuencia, el elevado déficit sanitario.

En definitiva, el inicio del nuevo curso plantea cuestiones en aspectos vitales para la ciudadanía y, su tratamiento por parte de la clase política, exige máxima cautela. ||
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios