“La Cuadrilla de la Muerte”, novel·la negra amb un Don Quixot del segle XXI
Alfonso Hinojosa, policia de Gavà, músic i escriptor.
JÚLIA REÑÉ
Perquè no totes les històries comencen amb el famós “hi havia una vegada”, i molt menys si es tracta de l’última novela d’Alfonso Hinojosa. I és que Hinojosa és capaç de barrejar aigua i oli. Morts vivents a l’estil The Walking Dead, pocions màgiques com les d’Alicia en el País de les Maravelles, inclús trastorns psicològics com en el film The Cabinet of Doctor Caligari (1920), aquest és el nou poti-poti de l’escriptor torrellenc, anomenat “La Cuadrilla de la Muerte”.
Catàstrofe, és així com desafortunadament es diu la família protagonista, propietària d’una funerària barcelonina. Dos fills molt peculiars, una àvia una mica tocada de l’ala i, com a cap de família, el Senyor Mariano –a qui us recorda aquest nom?-, quatre personatges pintorescos que viuran situacions iròniques i inimaginables.
Portant la realitat a l’extrem, així és com Hinojosa fa anar l’argument de la novel·la. I és que segons ell i com diu la dita: “la realitat moltes vegades supera la ficció”. Tot i afirmar que “la trama és pura imaginació”, en tots els seus llibres sempre hi és la figura del policia, ofici que exerceix en el cos municipal de Gavà. La seva aparició no és un fet casual, sinó que util itza això per corregir el que ell creu que és una idea massa mediatitzada: “la gent veu els policies com a mig déus o mig dimonis, quan realment són gent normal que fa, de millor o pitjor manera, la seva feina”.
En el llibre també deixa anar alguna pinzellada musical com, entre d’altres, Camino de rosas d’ Alejandro Sanz. És l’altre professió d’aquest escriptor local, Alfonso Hinojosa, un home del tot polivalent: escriptor, policia i músic. Pot ser moltes coses, doncs, però sens dubte és un apassionat. En l’àmbit literari, el tipus de lectura que més el fascina és la literatura clàssica, cosa sorprenent comparat amb les seves novel·les de ficció. És per això, que en aquest darrer llibre ha decidit caracteritzar el protagonista de manera que acaba sent una espècie de Don Quixot del segle XXI, posant-li en boca grans cites literàries. Això és només l’inici, ja que el seu proper treball serà un recull de poesia. Amb Alfonso Hinojosa, el policia i escriptor local, mai se sap, potser el veiem de nou fent de florista.
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“Cuando me jubile, le decía a mis alumnos, no pienso aburrirme. Ahora, me faltan horas”
Arturo González Hurtado, maestro jubilado y escritor
IMANOL CRESPO
Filólogo, profesor y ahora, después de jubilarse hace cinco años, escritor. Arturo González Hurtado (Yudego, Burgos, 1948) ha encontrado en la literatura su nueva pasión después de más de cuarenta años como docente, 25 de los cuales en Castelldefels, municipio donde reside. “Cuando estaba en activo tenía varias cosas pendientes. Lo hago para cultivarme, pero cuando tuve todo el material, alguien me dijo: hay que publicarlo”.
Estas inquietudes y el interés continuo de Arturo de seguir aprendiendo como un alumno más le ha llevado a la publicación de dos libros: “Curiosidades históricas y dichos populares” (Ediciones Albores, 2013) y “Investigaciones científicas y anécdotas históricas” (Editorial Círculo Rojo, 2014).
“Siempre me ha llamada la atención el tema de los dichos populares y de sus orígenes. Vas por Villadiego, en Burgos, preguntas y nadie sabe nada. Pasas por Úbeda…”. Y nada. Por ello, para todos los que estén en los cerros de Úbeda, Arturo González ha recogido el origen de hasta 500 dichos populares y otras curiosidades de la historia en un verdadero viaje en el tiempo que va, desde lo más local a la cultura general de todos. La variedad es tal que podemos encontrar, por ejemplo, un estudio del Castillo de Castelldefels o el porqué se le llama horchata a la bebida valencia: “Se dice que fue Jaume I a Valencia y que probó la leche de chufa que llevaba una joven; a lo que contestó a la muchacha: Això és or xata”. Sonríe Arturo mientras explica la anécdota con su perfecta entonación castellana, voz fuerte pero paciente y melodiosa.
Demuestra que le gusta lo que hace y por ello le dedica más de dos horas a diario leyendo, investigando. Si ya tuvo buena acogida, reconoce, entre los más íntimos; más está gustando su segunda propuesta que responde a la otra de sus inquietudes: la ciencia. “En este segundo libro he intentado sacar lo mejor de los científicos de primera línea mundial con ciencia que nos atañe a nuestra vida diaria”. Es este vínculo de la ciencia con el día a día, con la vida cotidiana, que hace que guste e interese a la gente, explica el autor. Ambos libros los ha presentado en la Biblioteca Central de Castelldefels y lo pueden encontrar tanto en el municipio como en otras grandes cadenas de librerías. Más allá de las ventas, el nuevo escritor de la comarca es un ejemplo para muchos jubilados que como él pasan de haber trabajado más de 40 años a tener muchas horas libres. Él ya lo tenía claro cuando sus alumnos venían aburridos de las vacaciones: “Yo cuando me jubile, no pienso aburrirme. Con las cosas que se pueden hacer. Ahora me faltan horas”, explica entre bromas.
Y es que ya tiene en el cajón dos publicaciones más, también de dichos y ciencia, que verán la luz en este mes de abril. “Tenía 100 dichos en la nevera que recogeré ahora en una nueva publicación; además de otro de ciencia de primera que tendríamos que tener en cuenta”. Arturo González ha encontrado una nueva pasión en la literatura. Ha escrito, incluso, una obra íntima de poesía. Todo, gracias a su inquebrantable inquietud y a sus ganas de ser docente y alumno de sí mismo.
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