Este 2020 no habrá pregón en la plaza de la Vila, ni Correfocs, ni Xarop de Canya, ni fuegos artificiales en el parking de la estación. El Ayuntamiento del Prat ha suspendido la Fiesta Mayor, que iba a celebrarse del 25 al 28 de septiembre, como medida de prevención sanitaria ante la pandemia de covid-19. La decisión se aprobó en el plenario municipal del pasado miércoles y todos los grupos respaldaron la propuesta del gobierno de la ciudad.
El presupuesto de unos 250 mil euros previsto para la Fiesta Mayor se destinará a la lucha contra la crisis social y sanitaria y a la promoción del tejido cultural local. En este sentido, el Ayuntamiento del Prat ha desplegado una estrategia de reconstrucción social y económica, llamada Ara més que mai, El Prat y dotada con un presupuesto de 5,5 millones de euros, para hacer frente a la crisis. Dos tercios de los 250 mil euros se abocarán a esta estrategia y el tercio restante a promover la cultura local, una de las grandes perjudicadas por la cancelación.
Desde el consistorio afirman que la decisión de suspender las fiestas “tiene que ver con el espíritu de la celebración, que va más allá de una programación cultural”. Consideran que, ante la imposibilidad del reencuentro y el contacto, la suspensión se convierte en un ejercicio de solidaridad y responsabilidad debido al riesgo de aumentar la transmisión del virus.
Valeria García, una joven pratense de 23 años, dice tener sentimientos encontrados tras conocer el anuncio de la cancelación de las fiestas. “Me siento fatal porque las anulen, pero creo que es lo que tienen que hacer, ya que es un peligro y una irresponsabilidad celebrarlas”, afirma. Patricia Molina, otra joven del municipio de 23 años, piensa como Valeria y ve “totalmente lógico que las suspendan”. Además, pide al Ayuntamiento que “utilicen el presupuesto para algo útil”.
Durante los días que se habría celebrado la Fiesta Mayor el consistorio no autorizará actos en la vía pública. Pese a la suspensión, el gobierno local anima a la ciudadanía a colgar banderas con el escudo de la ciudad en balcones y ventanas. Asimismo, insta a la población a cuidar de su salud para poder volver a celebrar fiestas mayores cuando pase la pandemia.
El Prat se suma a lista de municipios de la comarca que se han visto obligados a suspender sus fiestas mayores por el covid-19, entre los que se encuentran Sant Climent y Sant Andreu de la Barca. En cambio, en Viladecans se apostó por adaptar las fiestas al contexto actual y organizar eventos que no comprometieran la salud de las personas.
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