El Ayuntamiento de Sant Andreu de la Barca destinará 200.602 euros a la reparación de la piscina municipal de Can Salvi, tras detectar deficiencias constructivas en una auditoría técnica. Las obras se centrarán en la sustitución del vaso pequeño y la mejora de la impermeabilización exterior, con el objetivo de finalizar antes del próximo verano. El Ayuntamiento invertirá 200.602 euros en reparar la piscina municipal de Can Salvi, tras identificar problemas estructurales en una auditoría. Las obras incluirán la sustitución del vaso pequeño y mejoras en la impermeabilización para garantizar su correcto funcionamiento.
El Ayuntamiento de Sant Andreu de la Barca ha anunciado una inversión de 200.602 euros destinada a la reparación de la piscina municipal de Can Salvi. Esta decisión se toma tras la presentación de una auditoría técnica que reveló deficiencias constructivas y problemas técnicos en las instalaciones, especialmente en el vaso de la piscina, donde se han detectado filtraciones y movimientos estructurales.
La auditoría también señala inconvenientes en la unión entre la cubierta y el cierre perimetral, así como en la impermeabilización exterior del equipamiento. Según el concejal de Transparencia, Xavier Vila, estas anomalías son resultado de obras realizadas antes de las elecciones municipales de 2023, las cuales fueron ejecutadas de manera rápida y superficial. Vila enfatizó que “lo que se ha detectado es preocupante” y aseguró que el gobierno actual está comprometido con revisar y auditar rigurosamente lo realizado para actuar con responsabilidad.
Para abordar estos problemas, el Ayuntamiento planea sustituir completamente el vaso pequeño por una nueva estructura metálica con acabados en acero inoxidable y mejorar la impermeabilización exterior. El objetivo es asegurar la sostenibilidad, durabilidad y correcto funcionamiento del equipamiento.
El concejal de Deportes, Miquel Àngel Abril, expresó su preocupación por las deficiencias encontradas: “No podemos permitir que una instalación de este nivel presente problemas tan graves relacionados con la sostenibilidad”. Además, destacó la importancia de gestionar adecuadamente un recurso escaso como el agua en una ciudad del siglo XXI. La intención del Gobierno Municipal es completar las obras antes del inicio de la próxima temporada estival para no afectar los servicios ofrecidos a los ciudadanos.
Esta nueva actuación se suma a una primera intervención realizada antes del inicio del verano actual, que implicó una inversión cercana a los 30.000 euros enfocada en la reparación de elementos de seguridad. En aquella ocasión ya se había anunciado que habría una segunda fase de obras, ahora concretada gracias a los resultados obtenidos en la auditoría técnica.