Durante el mes de febrero muchos colegios realizan jornadas de “puertas abiertas”. Quieren facilitar y concentrar el conocimiento del centro educativo a las familias interesadas. Pasa a ser un mes muy importante en la vida de cada familia, especialmente los que tienen hijos o hijas que han de iniciar “P3”. Los padres (entiéndase padres y madres) pueden tener diversas posibilidades y han de decidir el colegio en que posiblemente estudiará su hijo durante 13 años, o quizá 15.
La influencia de la escuela en el futuro de cada ciudadano es inmensa, y puede ser tremendamente beneficiosa o perjudicial. Los padres, al escoger el colegio, tienen una enorme responsabilidad y será muy importante que valoren bien la decisión. Sería muy complicado educar en casa según unos valores y que en la escuela le estuvieran enseñando otros. No obstante, eso pasa bastante más de lo que nos pensamos.
Los padres preguntan poco sobre aspectos concretos de las enseñanzas que sus hijos reciben. Algunos chicos lo contarán pero otros muchos no. Y puede acabar habiendo un conflicto importante cuando se descubre, más tarde que temprano, que las educación no está funcionando bien. Por eso es tan importante el esfuerzo para elegir bien o cambiar de centro si fuera necesario. Pero no sólo eso, también es el momento de pedir una asignatura voluntaria que, generalmente, hasta los seis años no se recibe. Es la asignatura de “Religión Católica”. Es raro, aunque no imposible, que se dé la religión de P3 a P5. Sin embargo, para tener esa formación religiosa más adelante, a partir de primero de Primaria, es muy conveniente que en la inscripción de P3 ya se haga constar.
Luego, cuando empiece primero de Primaria conviene volverlo a recordar. No obstante, cuando en P3 no se indicó ese deseo de recibir la educación católica, puede que ya no se vuelva a preguntar al inicio de la Primaria, y alguien entienda que no se desea.
La enseñanza de la religión católica en las escuelas públicas es un derecho reconocido en la Constitución, como lo avalan diversas sentencias del Tribunal Constitucional.
Concretamente, en el tercer apartado del artículo 27 de la Carta Magna dice: “Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.”
Además el artículo 27 también recoge que “Todos tienen el derecho a la educación. Se reconoce la libertad de enseñanza”; Y que “La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana en el respeto a los principios democráticos de convivencia y a los derechos y libertades fundamentales” y también señala que “La enseñanza básica es obligatoria y gratuita.”
Y aunque sólo haya un niño/a que lo solicite se puede tener. Además, la asignatura se puede pedir en cursos más avanzados si no se ha recibido antes.
“No le hace ningún daño” y para entender la cultura y la civilización, las costumbres y tradiciones, la historia y el pensamiento, el arte y la iglesia, a Jesús y la vida eterna, es necesaria. La ignorancia es un campo abonado para que triunfe la manipulación y el fanatismo. El conocimiento de la religión contribuye al respeto y al diálogo social. ||
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