Los ladrones reventaron con el coche las puertas de acceso del centro comercial para facilitar la huida, lo que dejó doce personas heridas
Con el centro comercial a tope, como es habitual en estos días de compras navideñas, unos ladrones acabaron estampando su coche en las puertas de acceso del Alcampo de Sant Boi para facilitar la huida de sus compañeros que habían sido retenidos por la seguridad privada.
De esta manera, lo que era hasta el momento un intento fallido de robo ordinario derivó en un caos que -con el recuerdo vivo de los atentados de París- acabó con doce personas heridas leves por contusiones y ansiedad. Entre ellos, un niño que tuvo que ser trasladado al Hospital de Sant Joan de Déu de Esplugues y otras tres personas al Hospital de Sant Boi.
Y es que, por un momento, según testimonios que estaban en el supermercado del centro comercial o en las tiendas cercanas en ese instante y que no veían directamente lo que sucedió, se interpretó como un posible tiroteo, una bomba y, por tanto, un ataque terrorista, lo que generó la estampida en el momento del alunizaje.
Tal y como se puede apreciar en las imágenes, todo ocurre alrededor de las ocho de la tarde, cuando la seguridad privada del Alcampo consigue retener a uno de los presuntos ladrones. Con fuertes forcejeos, el retenido consigue acercarse poco a poco a las puertas de acceso del gran almacén santboiano cuando de repente un compañero que esperaba en la puerta decide estampar el vehículo para facilitar la huida, la cual consiguieron ante el asombro de los presentes.
Mossos d’Esquadra ha abierto una investigación y mantiene la búsqueda de hasta cinco personas que consiguieron fugarse.