No sabemos en qué edad la inocencia de un niño se convierte en picardía; la solidaridad en egoísmo; o la naturalidad en miedo. Una inocencia que permite a una niña de 8 años, Alba (Candela Moreno), preguntar con toda naturalidad a un inmigrante subsahariano de Santboi, Naïm (Roland Fosso) qué se le había perdido en la basura, mientras este, en realidad, busca víveres para subsistir. Sin miedo y con toda la solidaridad del mundo, Alba le acabará preguntando si quiere ser su amigo. Al desconcierto de éste podemos sumar la furia y rechazo de su padre (Jesús Puchol) representante de este egoísmo y miedo a compartir, pese a estar en una situación similar, tan habitual de nuestra sociedad.
Con estos ingredientes, el santboiano José Luís López ha presentado en los cines de Can Castellet su primer cortometraje, ‘Mi amigo Naïm’, rodado íntegramente en Sant Boi, con el objetivo de reflejar el aumento de la pobreza en el primer mundo, así como lo que supone la llegada de inmigrantes a nuestras ciudades. Un planteamiento que realiza con la idea de generar reflexión y ser didácticos: “Queríamos que tuviera un final abierto para dar paso a la reflexión de las personas”, ha dicho López tras el pase para la prensa, en donde compartía, también, el acento de esperanza que le reconocían profesionales de la educación.
En este sentido, como decíamos, López ha avanzado que se está trabajando con el Ayuntamiento de Sant Boi para cerrar un convenio de colaboración y poder realizar contenidos artísticos relacionados con el cortometraje que sirvieran de material curricular y que, por tanto, “se pudiera hacer servir para las nuevas generaciones”.
Antes, el cortometraje pasará por distintos festivales. Para empezar, ha sido uno de los casi 1.400 cortos (de 4.000 propuestas de todo el mundo) incluidos en el ‘Catalogue du Court Short Film Corner’ del Festival de Cannes 2017; ha sido seleccionado por el Étranger Film Festival de Bari; Filmets Badalona o el Sant Andreu de la Barca Film Festival. Además, ya preparan su participación en el Cinefest de Los Ángeles y en el Acafilms de Sao Paulo.
El acto ha contado con la presencia de la alcaldesa de la ciudad, Lluïsa Moret, que ha transmitido el compromiso de Sant Boi frente al proyecto de López para hacer visible el talento de personas de Sant Boi a través de sus productos artísticos; para dar apoyo a las propuestas que proyectan la ciudad a través de la cultura y por su contenido social: “cuenta con un mensaje con un gran contenido de valores”, ha apuntado Moret.
López ha reconocido que, “tras la crisis de los 50”, ha cumplido uno de los sueños que tenía desde hacía 20 años y que, “al final, por aquellas cosas de la vida en la que tienes que priorizar” había quedado pendiente.
Por su parte, el corto cuenta con la interpretación del también escritor Roland Fosso que, de nacionalidad camerunesa, ha cruzado hasta 12 países para llegar a Melilla y cruzar la valla. Hasta cinco intentos necesitó para acabar en territorio español. Una vez aquí estuvo viviendo en la vía pública hasta que, casualidades de la vida, coincidió con una pariente que ya estaba en Sant Boi. Desde entonces, su labor por integrarse ha sido tal que ha acabado siendo hasta el rey Baltasar de la ciudad: “Yo me siento santboiano. Aun así, siempre habrá esas personas que no entienden y ese rechazo por el que tenemos que seguir luchando para eliminarlo”.
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