Los Mossos le acusan de apropiarse de terminales que facturaba a empresas y luego no entregaba para venderlos por su cuenta.
Los Mossos han detenido a un vecino de l'Hospitalet, de nacionalidad española y 44 años, como presunto autor de un delito de estafa continuada. La policía asegura que el arrestado, aprovechando su función en una tienda de telefonía, pedía teléfonos de alta gama de las marcas más reconocidas, los facturaba a empresas, no los entregaba y, posteriormente, los vendía por su cuenta a amigos y en una tienda de compraventa de objetos de la ciudad.
Los investigadores calculan que el beneficio que consiguió con este modus operandi supera los 19.000 euros, que es la cantidad recibida solo como pago de los terminales que vendió en la tienda, a parte de los que vendió a particulares. Los agentes comenzaron a investigar a raíz de que se detectara que un mismo individuo vendía de manera continuada teléfonos de calidad nuevos y sin estrenar. Se trata de unas operaciones muy vigiladas por los Mossos para evitar que se vendan teléfonos procedentes de robos en tiendas legales.
La policía tiró de la manta y, a través de la investigación de las 33 vendas que el arrestado hizo presuntamente desde septiembre de 2016, se le pudo identificar y adivinar que trabajaba en una tienda de móviles como responsable de contratación, renovación y mantenimiento de líneas a empresas.
El detenido será citado en breve a declarar ante el juez y la investigación sigue abierta a la espera de recibir más denuncias de presuntas víctimas de estafa.
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