El riesgo de incendios puede evitarse. Este viernes 14 de junio se activa el plan de información y vigilancia contra incendios forestales de la Diptuació de Barcelona para cubrir las 475.502 hectáreas de bosques de la provincia de Barcelona. Este dispositivo estará activo hasta el 30 de agosto y pretende evitar diferentes fuegos en nuestro territorio mediante acciones informativas, disuasorias y de anticipación.
La organización provincial destinará un presupuesto global de 2,27 millones de euros entre informadores, vigilantes y operadores, 259 personas en total. El dispositivo cuenta con la colaboración de 269 ayuntamientos y 124 agrupaciones de defensa forestal (ADF). Este plan de información y vigilancia se inició en 1996 en el Alt Penedès y en el año 2000 se extendió a casi todos los municipios de la demarcación de Barcelona. Según datos de la Diputació, se ha logrado sensibilizar a los ciudadanos provocando una disminución muy marcada de las conductas de riesgo a partir de los esfuerzos realizados en acciones de información y disuasión, además de la vigilancia de las zonas más sensibles, como los territorios incluidos dentro de la Xarxa de Parcs Naturals de la Diputació de Barcelona.
Sin embargo, este verano se espera que sea el más difícil para los agentes forestales, bomberos y Mossos d’Esquadra ante la sequía intermitente que ha habido no solo en el Baix Llobregat sino en toda Cataluña. El agente forestal José Miguel de Pablo ha explicado en el Aquí, amb Josep Cuní de Cadena Ser que “los bosques están bastante mal, porque no ha llovido casi desde noviembre”. Esto sumado al “estrés de los bosques” ha provocado que la sequí se haya acumulado y que la masa vegetal “no se recupere con rapidez y como lo debería hacer”, asegura de Pablo.
Collserola es un polvorín
“Es muy complicado hacer extinción de incendios en Collserola por toda la gente que vive allí, en muchas urbanizaciones”, sostiene de Pablo mientras lanza un mensaje claro ante la dificultad de actuar en ese parque natural: “Collserola es un potencial polvorín”. De hecho, el agente forestal achaca a la nueva forma de vida de la gente junto al medio natural como principal peligro ante un incendio. “Tendríamos que hacer como hacían nuestros antepasados que a los alrededores de las masías no había árboles porque sabían que antes o después podría haber un incendio”, asevera de Pablo para explicar el porqué de cómo edificamos pegados a los bosques sin ningún tipo de precaución.
Campaña de prevención
El horario cubre las horas de máximo peligro de incendio forestal y es el comprendido entre las 12:30 y las 19:30 horas, durante todos los días de la semana del periodo establecido. Los responsables de control comenzarán el 2 de mayo y terminarán el 28 de septiembre y los operadores de apoyo a la coordinación comenzarán el 2 de mayo y terminarán el 27 de septiembre.
Las primeras semanas son especialmente importantes de cara a la prevención, dado que la población aún no tiene asumida la percepción el riesgo. El plan de vigilancia e información pone especial énfasis en este periodo, con la información activa a la población y la disuasión asociada a la presencia sobre el territorio del personal designado por la Diputació de Barcelona. A medida que avanza la campaña, las consecuencias positivas de este trabajo, así como de la del resto de los dispositivos, se evidencian en el hecho de que la población está más concienciada.
Además, según explica la institución provincial en un comunicado, se contempla la posibilidad de prolongación excepcional de la campaña, en todo o parte de los dispositivos, en caso de que se den condiciones meteorológicas de sequía extrema y sin previsiones de lluvia para finales de agosto. También se contempla la posibilidad de alargar el contrato de los responsables del control o de los operadores de apoyo a la coordinación en caso de necesidad del servicio.
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