Cuatro de los 14 quioscos que la ONCE tiene en Viladecans ya lucen el nuevo diseño de puesto, con una nueva imagen y unas características que lo hacen más ecológico y también más accesible para los propios vendedores. El más emblemático de todas las casetas de la organización de invidentes –la de la plaza de la Vila- se ha estrenado este viernes con la participación del alcalde de Viladecans, Carles Ruiz; la teniente de alcalde de Acción Comunitaria y Políticas de Igualdad, Gisela Navarro; el delegado territorial de la ONCE en Cataluña; Enric Botí,; el director de la agencia de la ONCE en El Prat de Llobregat, Jordi Costa; y la propia vendedora del quiosco del número 10 de la plaza de la Vila, Ana Mena.
El nuevo modelo de puesto de venta de los populares cupones está construido con materiales más ecológicos y consumen menos energía, según han explicado fuentes de la organización. Pero lo más destacable es que “facilitan la comunicación con el público” y, sobre todo, “el nuevo diseño cumple con los requisitos de accesibilidad universal para la persona que ejerce la venta y también para los compradores”, han destacado las mismas fuentes.
Los puestos, como el estrenado en la plaza de la Vila, tienen una mayor superficie acristalada, lo que hace que la exposición de los diferentes productos de juego de la organización sean más visibles para los compradores y estén mejor organizados “para ayudar al cliente en su elección”, han indicado desde la ONCE.
Para perros guía y sillas de ruedas
Para facilitar el trabajo a los vendedores ciegos de cupones que necesiten de un perro guía, el nuevo quiosco cuenta con un espacio para que el animal pueda estirarse cómodamente en el suelo mientras su amo despacha en el mostrador. El nuevo modelo también ha pensado en los empleados que se muevan con silla de ruedas pues está dotado de una rampa fija de acceso en el interior del quiosco. Además, todas las zonas de exposición son accesibles mediante una plataforma.
Con el fin de aumentar todavía más el confort del vendedor, el puesto de venta se ha dotado de “una silla ergonómica”, han precisado desde la organización de invidentes. Las mejoras en la comunicación y la inclusión se completan con unos laterales exteriores con frases en Braille, el sistema de lectoescritura propio de las personas invidentes.
Mejores condiciones laborales
La organización ha avanzado que el nuevo modelo de quiosco se va a ir implantando “progresivamente” en toda Catalunya y que se ha concebido para que sea “un icono” en las localidades en las que se instale. Un portavoz de la ONCE ha subrayado que el nuevo puesto de venta de cupones “cambia la imagen de esta puerta de acceso a un mundo de inclusión social, mejora las condiciones laborales de los agentes vendedores de la ONCE y también renueva la imagen de la ciudad”.