La compañía vicentina Ciments Molins ha anunciado, con un comunicado, la inversión de 193 millones de euros en sus plantas de Argentina. A través de la sociedad Cementos Avellaneda, de la que cuenta con el 50% de la propiedad, Ciments Molins dará así respuesta al aumento de proyectos de inversión privada y obras públicas que se prevén en los próximos años en el país latinoamericano.
En este sentido, el objetivo de la nueva línea de financiación es modernizar y mejorar la capacidad de producción de las dos plantas que tiene la compañía, las cuales pasarán a producir un millón de toneladas al año.
En concreto, la compañía ubicada en el término municipal de Sant Vicenç dels Horts invertirá 168 millones de euros en la planta de La Calera, en San Luis, que derivará en un aumento de la producción de 300.000 a un millón de toneladas al año a partir del segundo semestre de 2019. Obviamente, las novedades tendrán una repercusión en términos de ocupación con 800 nuevos puestos de trabajo en la fase de construcción, además de aumentar el empleo indirecto en un 50% una vez esté la planta renovada.
Por su parte, el resto de los 25 millones de euros irá a parar a la planta de Olavarria, en la provincia de Buenos Aires. La producción crecerá en 300.000 toneladas y lo hará antes que en San Luis. De hecho, se espera que la reforma esté completada a finales de este mismo año.
La compañía cuenta con una docena de plantas tanto en España, como en México, Argentina, Bolivia, Bangladesh o Túnez. En 2016 facturó 691 millones de euros y obtuvo 63,9 millones de euros de beneficio, un 25,6% más que en 2015.
Controlada en un 91% por la familia Molins, este verano, ha fallecido, a sus 97 años, una de las figuras clave en la historia de la compañía: Casimiro Molins Ribot. Fue miembro del consejo de administración durante 71 años, en el que ocupó varios cargos de responsabilidad.
El primero, en 1945, cuando fue nombrado consejero y secretario del máximo órgano de Ciments Molins; en 1972, pasó a ser el consejero delegado y desde 1986 era el presidente de la compañía. Cruz de Sant Jordi en 2012, consolidó con su dirección el crecimiento y la internacionalización del grupo. Actualmente, Julio Rodríguez es su consejero delegado.
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