Los accidentes se produjeron el fin de semana del 13 y 14 de enero; todos doblaban la tasa máxima permitida en la prueba de alcoholemia
Ni uno, ni dos, ni tres. Hasta cuatro accidentes diferentes se produjeron en las carreteras del Baix Llobregat durante las madrugadas de los días 13 y 14 de enero; de nuevo, con el alcohol como protagonista invitado de la noche. Y es que los cuatro causantes de los accidentes doblaban la tasa máxima permitida en las pruebas de alcoholemia. Ahora, los cuatro jóvenes, de edades entre 20 y 25 años, han sido denunciados penalmente como presuntos autores de delitos contra la seguridad vial por conducir bajo los efectos del alcohol.
El primero de los accidentes ocurrió a las 06 horas de la madrugada del sábado cuando la conductora de un turismo, según ha informado el Área Regional de Tráfico de la Región Policial Metropolitana Sur de Mossos d’Esquadra, provocó un accidente múltiple en la A-2, a la altura de Pallejà (sentido Lleida). Se vieron implicados un total de tres vehículos más, tras el choque de la joven, de 25 años, con el turismo que la precedía. Tras la prueba de alcoholemia, dio positivo con una tasa penal de 0,50 mg/l en aire expirado, es decir, el doble de lo legal (0,25 mg/l).
Solo unos minutos después, en la misma vía rápida y en el mismo sentido, pero a la altura de Sant Vicenç dels Horts, otro turismo chocó con la parte posterior de un camión que circulaba en el mismo sentido. El causante del accidente, un joven de 22 años, de nuevo duplicó con creces la tasa (0,56 mg/l).
Al día siguiente, el balance no fue mejor. A la misma ahora que en la noche anterior, a las 06:00 de la madrugada, un turismo colisionó solo –sin implicar a otro vehículo- con la barrera metálica de la vía B-20, en el punto quilométrico 3. La conductora, de 20 años, dio positivo con una tasa de 0,45 mg/l.
Una hora más tarde, en la B-120, cerca de Olesa, un vehículo golpeó con un talud del margen de la carretera tras salirse de la vía. El culpable no fue otro que el alcohol que llevaba en sangre, en este caso, un joven de 22 años (0,52 mg/l).
Los cuatro accidentes acabaron con un balance de cuatro personas trasladadas al hospital con heridas leves. Afortunadamente no se tuvo que lamentar ninguna víctima mortal, estadística que en este último año 2017 se ha disparado en la demarcación de Barcelona. Según datos oficiales del Servei Català de Trànsit, 71 personas murieron en una carretera barcelonesa a lo largo de 2017, 23 más que en 2016. Esta cifra representa un incremento del 47,91%. En Cataluña fueron, en total, 169 personas fallecidas, un 9,7% más respecto al pasado año completo. De ellos, 46 eran motoristas y 11 ciclistas.
Sea como fuere, estos datos y los casos que explicamos son la prueba de que todavía hay muchas cuestiones que mejorar desde el punto de vista de la seguridad vial. Y cabe incidir tanto en las nuevas problemáticas, como el uso del móvil mientras se conduce, como en las causas tradicionales, todavía por resolver: el consumo de alcohol.