Un ciudadano norteamericano de 43 años, vecino de Cornellà, guardaba en un local a 20 animales exóticos protegidos por el Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre. En una operación del SEPRONA, se han intervenido los animales y detenido al hombre, como presunto autor de un delito relativo a la protección de la flora y la fauna, otro de contrabando y un delito de tenencia ilícita de armas.
Y es que, durante el registro, que tuvo lugar el día 5 de julio, los agentes también intervinieron una pistola detonadora que estaba manipulada y disponible para hacer fuego real.
La investigación arrancó de una información que indicaba la posibilidad de que una persona pudiera poseer ilegalmente especímenes recogidos en el citado convenio internacional de especies amenazadas, sin cumplir con los requisitos necesarios. A partir de aquí, la Guardia Civil descubrió el local donde se ocultaban los animales. De hecho, el arrestado se desplazaba de manera regular al local, donde realizaba tareas de limpieza y arrojaba posteriormente a la vía pública los restos de agua sucia, material y excrementos de los animales.
Entre otros animales, se descubrió un varano Albigularix adulto del sur de África, un escorpión de la familia Pandinus Imperator, una boa arena, una pitón Reginus y otros tipos de serpientes y lagartos, algunos de ellos venenosos.
Según EUROPOL, el Dragón de Komodo intervenido es el primer ejemplar de esta especie criado y adquirido de manera ilegal que se recupera en Europa. Los animales fueron depositados en dependencias del zoológico de Barcelona y en el Centro de Recuperación de Anfibios y Reptiles de Cataluña (CRARC). En cuanto a los animales venenosos, como la serpiente cascabel o el escorpión, se llevaron a la Escola de Natura de Parets del Vallès.
Las diligencias instruidas fueron puestas a disposición del juzgado de instrucción 3 de Cornellà.
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