El pasado mes de abril, un mes que históricamente era un mes bueno para el aeropuerto Josep Tarradellas de Barcelona-El Prat porque generalmente incluía el ajetreada y multitudinaria jornada del Lunes de Pascua, ha roto esta tendencia habitual como consecuencia de la crisis generada por el Covid-19. Durante el mes pasado, las dos terminales barcelonesas recibieron la nimia cantidad de 25.307 pasajeros, cuando en el último día de las vacaciones de Semana Santa era normal que se superará el millón de viajeros. Las cifras significan una caída del 99,4% respecto al mismo mes del año 2019. Una debacle total.
Los malos resultados también son extensibles a la actividad en las pistas pratenses. En total durante el mes pasado operaron 1.499 aeronaves, que tomaron tierra o despegaron desde Barcelona. La reducción del tráfico de aviones comporta una caída del 95% respecto al mes de abril de 2019.
El otro parámetro del aeropuerto Josep Tarradellas que también ha sufrido los daños colaterales de la pandemia, aunque algo menos, ha sido el de transporte de mercancías. Los cargueros que han operado en El Prat han llevado en sus bodegas 4.924 toneladas de carga, solo un 24% menos que en el mismo mes del año pasado.
Material sanitario
Las cifras no han sido tan nefastas como las del tráfico de pasajeros o el número de despegues y aterrizajes por la continua llegada a las instalaciones barcelonesas de material sanitaria y de seguridad para luchar contra el coronavirus.
Si se analizan los datos de todo el primer cuatrimestre del año, la caída es menos acentuada. Así, entre enero y abril de este año se han contabilizado 8,12 millones de pasajeros (un 48% menos que en el mismo periodo de 2019) y 61.782 movimientos de aeronaves (un 39,7% menos que en el primer cuatrimestre del 2019).
24% menos de mercancías
En relación al tráfico de carga, las pistas de El Prat han registrado durante los primeros cuatro meses del 2020 el paso de 42.217 toneladas de mercancías, un 24% menos que durante el mismo periodo de 2019.
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