En menos de una semana L’Hospitalet ha pasado de tener 31 casos de infección por coronavirus registrados a constatar un brote con 107 casos confirmados. “Es una preocupante mala noticia”, ha reconocido la alcaldesa de La Hospitalet, Núria Marín (PSC), quien ha pedido a la ciudadanía que “no se relaje y continúe siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias” (como el uso obligatorio de la mascarilla y las medidas de distanciamiento social). El objetivo primordial del consistorio es evitar nuevos contagios y frenar la rápida propagación del covid-19, que es especialmente intensa en los barrios de La Torrassa, Collblanc y La Florida
De los tres barrios, el más afectado por el brote es con diferencia el de La Torrassa, donde se ha crecido de los cuatro casos contabilizados la semana pasada hasta los 37 actuales (un tercio del total del brote de la ciudad y casi diez veces más de los que habia en el barrio que hace solo unos días). Los contagios incluso han afectado a la residencia geriátrica de la barriada, motivo por el cual “se han activado todos los protocolos” y algunos ancianos han sido “aislados” ha informado Marín.
En núcleos familiares
La alcaldesa también ha hecho un llamamiento a la calma porque todos los contagios no están relacionados entre sí (se trata de "pequeños rebrotes” inconexos) sino que se circunscriben a varios núcleos familiares. "En principio, están todos controlados y, conjuntamente con la Conselleria de Salut y el Ministerio de Sanidad, se adoptarán las medidas que sean necesarias para que sigan así", ha subrayado la primera edil de L’Hospitalet.
Afortunadamente, pese al centenar de casos confirmados no hay colapso en los hospitales de la ciudad ni tampoco en los centros de atención primaria. De hecho, todos los ambulatorios siguen abiertos y funcionan con normalidad. Pero eso no ha evitado que persista el temor a que el brote pueda extenderse a las ciudades limítrofes. "Hay que ser proactivos -ha agregado Núria Marín-. Estamos rodeados de municipios. Hay que tomar medidas para frenarlo en L'Hospitalet, pero la realidad es que hay un transporte público, unas relaciones laborales, unas relaciones de ocio" que lo complican todo, ha agregado.
Confinamiento voluntario
Lo más importante ahora, ha recalcado la alcaldesa de L’Hospitalet, es que la población de riesgo opte por el confinamiento voluntario "cuanto más confinada y menos tiempo esté en la calle, mejor”. Sin embargo, Marín ha precisado que sus palabras son solo una recomendación ya que las competencias para decretar un confinamiento obligatorio corresponden a la Generalitat.
No obstante, la primera edil ha advertido que si la población no sigue las recomendaciones “se echarán por tierra todos los avances conseguidos durante el estado de alarma”. “Debemos ser conscientes de que, hasta que no haya una vacuna, hay ser muy cuidadoso en el espacio público", ha sugerido la alcaldesa de la segunda ciudad de Cataluña
Espacios alternativos
Núria Marín ha solicitado a la Conselleria de Salut que le facilite el nombre de las personas que han dado positivo para que desde el Ayuntamiento de L’Hospitalet se pueda comprobar que las viviendas de los afectados “reúnen las condiciones para que puedan realizar el confinamiento” con garantías. En caso de que se detecten situaciones de riesgo, el equipo de gobierno local buscará un espacio alternativo adecuado para que se lleve a cabo el confinamiento.
Desde este sábado, se ha desplegado en la ciudad un dispositivo especial -integrado por agentes de la Guardia Urbana, personal de Protección Civil, voluntarios y miembros de otras entidades- para informar a los vecinos de la situación provocada por el brote de coronavirus. La alcaldesa también ha pedido “responsabilidad” a los vecinos a través de su cuenta de Twitter.
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