www.elllobregat.com
Una boda en tiempos de pandemia: ¡Me caso por streaming!
Ampliar

Una boda en tiempos de pandemia: ¡Me caso por streaming!

El amor todo lo puede. Y Neus y David dan fe de ello. A pesar de la incertidumbre y la alarma que generaron por los rebrotes de coronavirus detectados en L’Hospitalet en el mes de julio, se han casado en el Palauet de Can Buxeres.

Se han dado el “Sí” en medio de una pandemia mundial. Después de dos años planeando su gran día y de varios aplazamientos (los últimos debido al confinamiento y la situación sanitaria) ni los novios, ni sus invitados, ni el personal del Ayuntamiento de L’Hospitalet iban a permitir que nada les arruinase el día, aunque la boda no fuera exactamente igual que la que habían soñado. Pero una boda siempre es una boda, qué caray. “La ceremonia fue preciosa, aún con mascarillas, emocionante e inolvidable”, recuerda orgullosa Neus.

La pareja pospuso la boda a julio, suponiendo que la “nueva normalidad” ya habría llegado a la segunda ciudad de Cataluña. pero de nuevo el destino les volvió a poner obstáculos en el camino que tenía que ser de rosas. Inicialmente, la boda se debía celebrar por la tarde -con unos 50 invitados- y culminaría con una cena. Pero justo la semana anterior, el covid-19 rebrotó en la ciudad y recomendó el confinamiento voluntario de toda la población justo el día antes del enlace.
A los novios no les quedó más remedio que arremangarse y cambiarlo todo para poder garantizar la seguridad de sus invitados y celebrar (sí o sí) la boda prevista.

Los 15 invitados que inicialmente podían entrar al Palauet acabaron convertidos en sólo cinco, porque el aforo máximo de seguridad era de siete personas (tortolitos incluidos). Neus destaca que dentro del recinto debían seguir “estrictas normas en cuanto a los asistentes, con sillas separadas y ceremonia con mascarilla en su totalidad”. Hasta se tuvo que recortar la duración de la ceremonia, que al final se redujo a 15 minutos. Pero todo salió bien, Neus y David aseguran que el departamento de Protocol del ayuntamiento ejerció de auténtica hada madrina en el cuento, les tranquilizó y les apoyó en todo momento “para no perdiera la ilusión de un día tan importante en sus vidas”.

¿Qué paso con el resto de los invitados? Pues que las nuevas tecnologías les echaron un cable. Unos pocos esperaron fuera, hablando, como pasa en todos los casorios, pero la mayoría pudo seguir la boda en riguroso directo, gracias al servicio de streaming que ofrece el Ayuntamiento de L’Hospitalet (de forma gratuita) en estas ceremonias tan particulares. Todo un lujazo, digno del mejor evento. “Se veía perfectamente y con una calidad excelente”, confirma la novia

Este servicio municipal, que se ofrece desde el mes de julio, precisa de la coordinación entre Protocol y el personal del Palauet para que se utilice el menor equipo técnico posible (sólo una cámara) y también el menor personal. La cámara se deja encendida y al final de la ceremonia se apaga. Antes de jurarse amor eterno, los novios reparten entre sus invitados las claves de acceso a la URL que les facilita Protocol, como si fueran los puros del convite, y así quien lo desee pueda disfrutar de ese momento especial, de una forma u otra, desde el móvil, desde una tableta e incluso desde la Smart TV del salón, si no se tienen ganas de salir de casa

El streaming se convirtió así en el mejor padrino de los novios y los convidados no levantaron los ojos de las pantallas de sus smartphones. “Pudieron seguir la boda perfectamente, con muy buena calidad de audio y de vídeo. No se perdieron ni un detalle”, sonríe la pareja

Este servicio gratuito de retrasmisión de bodas está teniendo “mucho éxito” en las celebraciones programadas en el Palauet de Can Buxeres y también “muy buena acogida”, confirma un portavoz del departamento de Protocol. Y no sólo por parte de los novios, también por parte de los invitados, que gozan “de una experiencia única y muy satisfactoria”, corroboran David y Neus. Muy probablemente. el novedoso servicio ha venido para quedarse y una vez pase toda la crisis del covid-19, es muy posible que se le dé un nuevo uso como invitar a seguir la boda “a invitados al enlace que viven fuera y no se puede desplazar”, vaticinan fuentes municipales.

¿Y cuál fue el resultado de la fusión de algo tan tradicional como una boda con algo tan innovador como una retrasmisión por streaming? La novia afirma que algo ideal: “una celebración sin lujos y como único protagonista nuestra felicidad y la de todos los que ese día quisieron acompañarnos en uno de los días más felices de nuestra vida”. Y con “un enorme agradecimiento”, seguramente eterno, de la parejita al personal municipal que también lo hizo posible
Al final, Neus y David culminaron su sueño nupcial. Aunque nada ocurrió como habían planeado, el 18 de julio de 2020 se ha convertido en esa fecha especial que recordarán siempre. Después de la ceremonia. Los nuevos desposados y el resto de los invitados se fueron a un restaurante a celebrar su amor, entre mascarillas y gel hidro-alcohólico.

El restaurante también tomó “todas las medidas de seguridad necesarias” para prevenir contagios, como apartar a los invitados de la boda del resto de clientes del local, poner mesas separadas con máximo de siete comensales y mantener la distancia de seguridad entre cada persona. La luna de miel de momento queda pospuesta para el 2021. Como dicen los novios, “esperando que todo el tema del coronavirus se haya quedado como un mal sueño de 2020”. Y vivieron felices y comieron perdices. III

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios