La Guardia Urbana de L’Hospitalet denuncia a un restaurante con 16 comensales dentro

Para evitar de nuevo la saturación de los espacios sanitarios es imprescindible la colaboración ciudadana y quedarse en casa. Esto es lo que llevan repitiendo las autoridades -como mínimo- desde septiembre, cuando empezó esta segunda ola de covid-19. Los diferentes cuerpos de seguridad procuran garantizar que las medidas se cumplen e incentivan (pero a la inversa) a la población a respetarlas.

Porque si no se cumple pasa como este fin de semana en L’Hospitalet, donde la Guardia Urbana ha multado a 57 personas y a un local por incumplimiento de las restricciones vigentes por la pandemia de coronavirus. Lo más destacado de las actuaciones es que se obligó a cerrar y se ha denunciado a un restaurante que tenía a 16 consumidores en el interior, algo que está terminantemente prohibido porque sólo se permite el servicio a domicilio o el take away (comida para llevar).

Si se comparan estas cifras con las del fin de semana anterior (el primero del confinamiento perimetral y que coincidió con un festivo), sorprende que hayan aumentado las propuestas de sanción de los agentes. Los agentes locales de L’Hospitalet han sancionado a 31 personas por consumo de alcohol en la vía pública, a 19 por incumplimiento del toque de queda (que en Cataluña empieza a las 22.00 horas) y a otras siete por no llevar mascarilla.

Patinetes y confinamiento

En los controles realizados se han identificado 121 personas y 29 vehículos que quebrantaban el confinamiento perimetral. Además, se han impuesto cinco sanciones a patinetes eléctricos por no circular correctamente y se ha denunciado a tres personas por posesión de drogas.

Durante viernes, sábado y domingo los agentes también han llevado a cabo 91 actuaciones relacionadas con molestias por ruido en espacios públicos, parques y plazas, principalmente, pero también en domicilios particulares.