Agentes de los Mossos d’Esquadra de la División de Investigación Criminal (DIC) de la Región Policial Metropolitana Sur y de la Unidad de Investigación de la comisaría de Gavà, han conseguido desarticular una organización criminal, que se encontraba regentada por un clan familiar de Viladecans y se dedicaba al tráfico de drogas.
Tras las dos fases de la investigación, han resultado detenidas 10 personas como autoras de presuntos delitos como pertenecer a una organización criminal, por tenencia ilícita de armas, defraudación del fluido eléctrico y un delito contra la salud pública. La primera fase de la investigación se basó en investigaciones policiales sobre un punto de venta de cocaína en una vivienda de Viladecans. En este inmueble, se llevaba a cabo la producción, elaboración y manipulación de cocaína.
En el mes de marzo de 2021, los agentes realizaron un operativo con entrada y registro en la vivienda, donde localizaron más 206 gramos de cocaína repartidos en 80 dosis, por un valor de 12.000€ en el mercado ilegal. Junto a esta sustancia, intervinieron 7 kg de sustancias de corte, basculas de precisión y 3.200 € en efectivo. En el momento de la intervención, se encontraban en el domicilio 2 personas que estaban al mando del punto de venta y fueron detenidas y posteriormente entraron en prisión. La primera fase, se resolvió concluyendo que las personas detenidas formaban parte de un clan familiar instalado en el municipio y que extraía grandes cantidades de dinero.
Se creó un equipo conjunto de investigación, formado por agentes de la Unidad Territorial de Investigación de la Región Policial Metropolitana Sur y la Unidad de Investigación de la comisaría de Gavà, para iniciar con la segunda fase. Uno de los integrantes del clan era el líder a través del cual trabajaban el resto de integrantes y otro de ellos, era la mano derecha del líder y se hacía cargo del punto de venta que se desmanteló en marzo de 2021. Una cuarta persona gestionaba el piso, cuya función era de guardería de la droga.
El piso principal, era el del punto de venta, que se encontraba de reforma para mejorar las medidas de seguridad para evitar entradas, no solo de la policía, sino también de grupos rivales en el ámbito del tráfico de drogas. En este piso se trabajaba hasta la medianoche, y después la actividad ilegal se trasladaba a otro domicilio, donde trabajaban de madrugada y en el cuarto piso, se encontraba la plantación interior de marihuana.
Finalmente, el 22 de marzo de 2022, se realizó un dispositivo de explotación de la investigación, basado en cuatro entradas y registros en domicilios de Viladecans. Los agentes intervinieron en el registro de la vivienda de los líderes del clan familiar, varios relojes de alta gama, documentación y alrededor de 5.000 € en efectivo. En el domicilio que tenía función de guardería se intervinieron dos armas de fuego cortas, una escopeta i 600 cartuchos, junto con básculas de precisión, 600 gramos de sustancias de corte y 62 envoltorios con 70 gramos de cocaína en el interior de cada uno. En otro domicilio, se encontraba una plantación de marihuana con 407 plantas.
En el momento del registro no se encontraba nadie el interior, pero los agentes consiguieron detener a los 8 integrantes en la segunda fase de la investigación y pasaron a disposición judicial el 25 de marzo de 2022, donde el juez dictaminó su libertad con cargos.
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