El Hospital Universitario de Bellvitge ha incorporado un láser de CO2 en su Servicio de Ginecología. Este se utilizará para tratar los síntomas de atrofia y sequedad vaginal que registran muchas de las mujeres que están tratándose por algún tipo de cáncer ginecológico. Según han señalado, en muchas ocasiones las pacientes no pueden recibir ninguna de las terapias habituales para el síndrome genitourinario debido a estos tratamientos, por lo que se ven obligadas a convivir con unos síntomas que impactan directamente en su calidad de vida.
El Dr. José Manuel Martínez, del Servicio de Ginecología del Hospital de Bellvitge, ha indicado que “nuestra previsión es tratar entre 60 y 80 pacientes oncológicas anualmente con el láser de CO2 con el objetivo de mejorar su calidad de vida con la máxima seguridad que ofrecen los resultados clínicos”.
El láser que han incorporado emite una luz por estimulación del CO2 y produce un efecto térmico que regenera la mucosa vaginal, gracias a la formación de nuevo colágeno, la proteína que permite la recuperación de la elasticidad del tejido vaginal. Este tratamiento se lleva a cabo en dos o tres sesiones ambulatorias del láser.
Además, este no es el único efecto positivo que incorpora el láser, sino que también supone un impulso de la investigación, ya que como subraya el Dr. Martínez, “podremos poner en marcha nuevos estudios para confirmar la mayor eficacia del láser en relación a otros tratamientos farmacológicos”.
Finalmente, la adquisición de este láser ginecológico de CO2 forma parte del programa de compra pública innovadora PRI-ERAS, la cual busca incorporar un programa de recuperación intensificada de las pacientes de procedimientos quirúrgicos de oncología ginecológica y cirugía de suelo pélvico. Esta iniciativa está subvencionada, además, por el Programa Operativo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).
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