El sindicato UGT ha criticado la falta de recursos y formación en los coordinadores anti-bullying en las escuelas de Cataluña. Según UGT, la medida es meramente estética y de bajo costo, a pesar de la gravedad del problema del acoso escolar, pues los coordinadores no tendrán suficientes horas de dedicación ni remuneración para ejercer su cargo adecuadamente.
La delegación comarcal del sindicato UGT en el Baix Llobregat ha suscrito las críticas que la sección de Servicios Públicos de la fuerza sindical ha vertido sobre la fallida figura de los Coordinadores de
coeducación, convivencia y bienestar (COCOBE), conocidos entre losprofesionales del sector como coordinadores anti-bullying, que recientemente ha puesto en marcha la Conselleria d’Educació. Según UGT, la medida ha demostrado ser meramente estética y de ‘low cost,’ pese a la gravedad del problema que se pretende atajar (el acoso escolar) y que incluso se está tratando de invisibilizar.
Solo un mes y medio después de comenzar el curso, y cuando los diferentes centros educativos de la comarca (así como los del resto de Cataluña) ya habían encontrado a las personas idóneas para cubrir las funciones de coordinadores contra el acoso escolar, Educació ha comunicado a las escuelas que “este cargo no dispondrá de las horas
necesarias para ejercerlo, porque no se han ampliado las horas de dedicación a los coordinaciones de los centros educativos, ni tampoco estará remunerado porque no hay presupuesto”, ha lamentado Jesús Orellana Responsable Educación Pública de UGT en Cataluña.
“Con suerte tendrán una formación equivalente a un cursillo de 30 horas lo que supone coordinadores anti-bullying de low cost en nuestras escuelas e institutos”, ha declarado Orellana. Según el sindicalista, el docente que se haga cargo de estas tareas “tendrá escasa formación” específica relativa a esta delicada temática y además tendrá que añadir estas funciones “a su trabajo habitual sin ninguna retribución”.
El acoso escolar, una lacra
El acoso escolar es una de las grandes lacras sistema educativo. “Las escuelas e institutos deberían ser espacios libres de violencia, donde el alumnado se sienta seguro, pero desgraciadamente esto no es así”, ha reiterado Jesús Orellana. El enfado en el sector es mayúsculo porque se prometió que el COCOBE de cada centro educativo sería “un cargo de especial relevancia y responsabilidad que recaería en un profesional docente especialmente formado en este ámbito, con el tiempo de dedicación adecuado y una remuneración equivalente a cualquier cargo de coordinación”, ha recordado el representante de UGT.
“La convivencia en las aulas es un problema bastante importante como para dedicarle los recursos necesarios y la figura del COCOCBE podría ser una buena herramienta que ayuda a prevenir y erradicar la violencia de las aulas pero está quedando demostrado que la conselleria no ha creído nunca en ello, por mucho que intente vender lo contrario”, ha reivindicado Orellana. El responsable de educación pública del sindicato ha advertido que “en el mejor de los casos” los nuevos coordinadores “podrán dedicarle una hora semanal al cargo, independientemente del tamaño del centro, como si fuera lo mismo una escuela de 250 alumnos que un instituto de 900”, ha incidido el sindicalista.
Si (
No(
