Entre el 8 y el 14 de agosto se impone el tiempo estable, con cielos despejados o poco nubosos y sin previsión de lluvias. El litoral quedará algo más contenido en máximas, pero con mínimas altas y sensación de bochorno.
El Baix Llobregat afronta una semana de calor sostenido y ambiente muy seco. Los modelos apuntan a un ascenso térmico progresivo desde este viernes, con un primer máximo entre el domingo 10 y el lunes 11, y un nuevo repunte el jueves 14. Predominarán los cielos despejados o con intervalos nubosos puntuales; no se esperan precipitaciones.
La distribución del calor será desigual. En el interior y entorno de Montserrat (municipios del valle del Llobregat medio) se alcanzarán picos de 40–41 °C en las jornadas de mayor rigidez térmica. En el prelitoral las máximas se situarán entre 37 y 39 °C, con tardes muy calurosas. En el litoral (franja costera y primera corona metropolitana) las máximas quedarán entre 33 y 36 °C en los días de pico, pero con mínimas de 24–25 °C en varias noches, lo que se traducirá en noches tropicales y descanso complicado por el bochorno.
La secuencia prevista deja viernes y sábado como días de transición, con subida clara de las temperaturas; domingo y lunes marcarán el primer techo térmico de la semana; martes podría ofrecer un respiro relativo en la costa, mientras que el miércoles y, sobre todo, el jueves, volverán a empujar el termómetro al alza en el interior.
Ante este escenario, se recomiendan medidas de autoprotección: hidratación frecuente, evitar la exposición solar en las horas centrales, ventilación nocturna cuando sea posible y especial atención a personas vulnerables. En el litoral, las mínimas elevadas serán el principal factor de incomodidad; tierra adentro, lo serán las temperaturas extremas diurnas.
Si (
No(
