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Milagro en el metro: Dos policías reviven a una mujer con un infarto en la estación de Santa Eulàlia
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Milagro en el metro: Dos policías reviven a una mujer con un infarto en la estación de Santa Eulàlia

martes 06 de febrero de 2024, 16:00h
Dos agentes de la Policía Nacional fuera de servicio han salvado la vida a una mujer de 51 años que acababa de sufrir un infarto en el interior de un vagón del metro a la altura de la estación de Santa Eulàlia (L1), en L'Hospitalet. Los agentes han realizado durante 20 minutos maniobras de reanimación hasta queha llegado un desfibrilador que ha logrado "resucitarla". La rápida actuación de los dos policías ha resultado crucial para salvar a la mujer, que ha estado tres semanas hospitalizada pero se está recuperando bien y ha agradecido públicamente a los policías su ayuda.

La rápida, certera y audaz actuación de dos agentes de la Policía Nacional que estaban fuera de servicio ha permitido salvar la vida a una mujer de 51 años que había sufrido un infarto en un vagón de metro, a su paso por la estación de metro de Santa Eulàlia (L1) en L’Hospitalet. Los dos policías, con el beneplácito de un enfermero y un estudiante de enfermería que se encontraban en el lugar, ha practicado a la mujer las maniobras de reanimación cardio-pulmonar (RCP), lo que ha resultado crucial. El salvamento, que tuvo lugar hace tres semanas, concluyó con éxito gracias a que un guardia de seguridad de la estación ha llevado hasta el andén un Desfibrilador Externo Automático (DEA), que ha ‘resucitado’ a la víctima.

Los dos policías ‘salvadores’ acababan de terminar su jornada laboral, por lo que se encontraban libres de servicio y se dirigían a sus domicilios haciendo uso del metro. A la altura de la estación de Santa Eulalia de la línea 1 del suburbano, escucharon gritos de auxilio que procedían de un vagón, por lo que se dirigieron a la carrera hasta el lugar, donde se encontraron un gran tumulto de gente y una mujer tendida en el suelo “que no respiraba ni tenía pulso”, han precisado las mismas fuentes.

Maniobras de reanimación

Tras identificarse como policías, los agentes han colocado a la mujer en el andén en la posición adecuado para iniciar las maniobras reanimación cardio-pulmonar mientras el personal de seguridad y varios trabajadores del metro daban aviso a emergencias para que acudieran al lugar. Los más de 20 minutos que los dos agentes, adscritos a Jefatura Superior de Policía Nacional de Cataluña y que ya habían finalizado su jornada laboral, han practicado “de forma coordinada” las maniobras de RCP y el uso correcto del desfibrilador, han obrado el milagro: la mujer ha conseguido recuperar levemente el pulso y la respiración a la llegada a la estación de metro de los servicios sanitarios de emergencia, que han trasladado a la paciente hasta el hospital más cercano.

Huelga decir que las maniobras de reanimación requieren un gran esfuerzo y que solo el relevo entre los agentes evitó “que cayeran desfallecidos por el agotamiento”, han asegurado fuentes policiales. Pero, pese al tesón de los dos policías, no ha sido posible reanimar a la mujer, que seguía con las constantes vitales inertes- y ha sido entonces cuando se ha decidido utilizar el DEA, siguiendo las instrucciones de uso del instrumental. En total, se le han tenido que realizar dos descargas consecutivas a la mujer para recuperarla.

Minutos vitales y rápida actuación

Según la Jefatura Superior de Policía Nacional de Catalunya, el responsable médico del equipo de emergencias que ha acudido a la estación de Santa Eulàlia ha corroborado que acaba de sufrir un infarto y que ha logrado salvar su vida gracias “a la rápida actuación de los agentes” ya que cuando ocurren este tipo de sucesos “los primeros minutos son vitales para aumentar el porcentaje de la probabilidad de vida y reducir asimismo el porcentaje de posibles secuelas”, han precisado las mismas fuentes.

Como consecuencia de la parada cardiorrespiratoria, la mujer ‘resucitada’ ha estado tres semanas ingresada en el hospital, según a explicado a los agentes que la salvaron y ya se encuentra en su casa y, completamente, a salvo, recuperándose de las lesiones provocadas por la parada cardiovascular. La mujer ha agradecido públicamente “la rápida actuación de los dos policías” que no dudaron ni un instante en prestarle auxilio.

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