Recomendaciones del Ajuntament para prevenir incendios en zonas forestales

Las altas temperaturas que se registran durante el verano incrementan considerablemente el riesgo de incendios forestales. Ante esta situación, es fundamental adoptar medidas preventivas para evitar incidentes que puedan derivar en incendios. En particular, las áreas cercanas a entornos forestales, como urbanizaciones y viviendas aisladas, deben seguir las recomendaciones de Protección Civil para minimizar los peligros.

Mantenimiento y prevención

El Ajuntament lleva a cabo un mantenimiento regular de las franjas perimetrales destinadas a la protección contra incendios forestales. Estas franjas tienen como objetivo reducir la intensidad del fuego en caso de un incendio y facilitar las labores de extinción, además de limitar la propagación hacia zonas boscosas.

Para reforzar la seguridad en el hogar y el jardín, se sugieren varias recomendaciones prácticas:

Recomendaciones para hogares y jardines

A casa y al jardín:

• Mantener una franja de al menos 2 metros sin vegetación o materiales inflamables alrededor de la fachada.
• Limpieza regular de la azotea para evitar la acumulación de hojas secas y otros restos que puedan ser inflamables.
• Si se plantan árboles, dejar una distancia mínima de 6 metros entre ellos para evitar que las ramas o copas se toquen.
• Evitar cercas de bruc o vegetación seca cerca de la vivienda.
• Almacenar leña y otros materiales combustibles a más de 10 metros del edificio.
• Tener a mano una manguera de riego lo suficientemente larga y una bomba de agua por si se interrumpe el suministro eléctrico.

En caso de emergencia

En caso de emergencia:

• Llamar al 112 proporcionando toda la información posible sobre la situación.
• Seguir el plan de autoprotección y las indicaciones emitidas por las autoridades competentes.

La adopción de estas medidas no solo protege los hogares, sino que también contribuye a salvaguardar el entorno natural frente a los devastadores efectos del fuego. Es responsabilidad compartida mantener un entorno seguro durante los meses más críticos del año en cuanto a incendios forestales.