Natalidad

Aunque con alguna excepción, es tendencia general en las sociedades occidentales el paulatino descenso de la tasa de natalidad.

Cada vez nacen menos niños, es una evidencia incuestionable, que se sustenta no solo en la percepción personal –no se ven tantos menores por la calle o jugando en las plazas como hace unas décadas- sino en las cifras.

En Viladecans, se ha celebrado el evento anual de bienvenida a los bebés nacidos en 2023. Debido a la sequía, en lugar de plantar árboles, las familias han apadrinado árboles existentes. Los niños han apadrinado doce árboles y colgaron deseos en ellos. Aunque la natalidad está disminuyendo, se ha registrado un ligero aumento de nacimientos en comparación con el año 2022.

En Viladecans, los recién nacidos en 2022 ha sido acogidos con el simbólico acto de plantar 12 árboles. Los padres han colgado entre sus ramas deseos de felicidad para los bebés, que se han bautizado con 276 nombres diferentes, siendo los más populares Nil y Lucía.

La baja natalidad es un problema de nuestras sociedades, y un problema a fututo si no recibe la atención que merece desde las diferentes instituciones públicas y privadas.

Crónica del último pleno municipal de Sant Boi, en el que se abordaron temas como la falta de alumnos en las escuelas, la importancia de fomentar la natalidad, la competencia desleal en el sector agrícola, el traslado de centrales eléctricas y tendidos de alta tensión, el impacto de la inmigración en la delincuencia, los pagos al equipo de rugby local y demandas por lesiones. También se discutió sobre la accesibilidad a edificios históricos y los problemas económicos del ayuntamiento. En la sesión de control se trataron asuntos como los "sin techos", la tasa turística y las colonias de gatos.

En 2021 se contabilizaron en el Baix Llobregat 5.988 nuevos nacimientos, una cifra inferior a la media catalana. El 24,8% (casi una de cada cuatro) madres que tuvieron hijos en 2021 eran extranjeras