Manu Reyes (Barcelona, 1976, pero vecino de Castelldefels desde 2002) se presenta por cuarta vez consecutiva a la alcaldía de Castelldefels por el PP. Fue elegido concejal en 2007 y la primera vez que se presentó como cabeza de la formación conservadora (2011) se aupó como alcalde. En 2015 y 2019 volvió a ganar las municipales con holgura, pero un pacto de toda la oposición en su contra le privó de revalidar el cargo. Está convencido de que el próximo 28M volverá a recuperar el bastón de mando de alcalde porque se palpa en el ambiente y porque las encuestas lo sitúan a un puñado de votos de la mayoría absoluta.
Las encuestas sitúan al PP al borde la mayoría absoluta en Castelldefels...
Sí, Las expectativas están por todo lo alto. Hace falta un cambio en Castelldefels y la gente es cada vez más consciente de ello, por eso nos da cada vez más su apoyo. Rozamos la mayoría absoluta, es posible que estemos a menos de 300 votos de lograr la mayoría suficiente para coseguir la alcaldía, como señala la encuesta de El Llobregat. Hay otras encuestas que también nos dan entre 12 y 13 concejales, que es el límite de la mayoría absoluta. Es muy importante que se consiga esa mayoría absoluta.
¿Y eso cómo se consigue?
Atrayendo a todo el voto útil. Aglutinándolo bajo el mismo paraguas para que no se pierda ninguno.
¿Qué ocurriría si no se logra esa mayoría absoluta, si solo se ganan las elecciones municipales y ya está?
Pues si no se logra, es muy probable que los que pierdan las elecciones acaben pactando en los despachos lo que no se han ganado en las urnas, como ha ocurrido en las dos últimas elecciones municipales. Necesitamos acaparar todo el voto útil. Castelldefels se merece un cambio, por eso les pido a los vecinos que confíen en mí, que se olviden de las siglas. Va de personas.
Hablas de aglutinar el voto en unas elecciones en la que hay más candidaturas que nunca.
Sí, se presentan once candidaturas. Bienvenidas sean todas y que decidan los vecinos. Pero es cierto que no todas las listas van a conseguir el 5% de los votos necesarios y se van a quedar fuera del consistorio. Por eso vuelvo a apelar al voto útil. Somos la fuerza que ha ganado tres veces seguidas en Castelldefels y en esta cuarta vez queremos conseguir la mayoría absoluta. Si el voto se fragmenta volverá a buscarse un acuerdo de 'todos contra Manu' como hace cuatro años. Por eso la única garantía de cambio es votar al PP.
Lo del 'todos contra Manu' no se puede volver a repetir.
No. En 2015 fueron diez formaciones en cinco candidaturas las que se unieron contra mí, que había ganado las elecciones. Eso significa que cada concejal de gobierno era de un partido diferente. Incluso se cambió de alcaldesa a los dos años. No se sabía quién mandaba, si es que mandaba alguien, ni hacia dónde se iba. Para que un barco navegue hace falta un capitán que marque el rumbo y cuando las cosas no funcionan lo que hay que hacer es cambiar al capitán no cambiar el barco. Ahora en el barco de Castelldefels hay diez capitanes y el barco no avanza y la gente lo ve, porque se está tirando el dinero en proyectos estériles y que no gustan como, la reforma de la avenida Constitución o el paseo de los Baños
¿Y cómo ha digerido la ciudadanía que pese a ser candidato más votado en 2015 y en 2019 no seas el alcalde de Castelldefels y que haya tantos 'capitanes'?
Los ciudadanos de Castelldefels están completamente en contra de ese mercadeo. Solo hay que darse una vuelta y preguntar un poco para comprobar que los vecinos no quieren que el 29M se vuelvan a repetir los pactos de las dos últimas legislaturas. Están molestos. No les gusta que los partidos derrotados se dediquen a mercadear como si fuera un bazar, que se repartan las concejalías como si fuera una tarta, habiendo perdido. Quieren que yo sea el alcalde, porque así me lo he ganado en las urnas. Porque para eso me votaron.
Y eso, ¿en qué se nota?
Hay muchas personas a las que no conozco y que me paran por la calle y me dicen: "yo soy de izquierdas o soy independentista, pero te voy a votar a ti, porque eres el mejor y porque tienes el mejor equipo". Me quedo con eso. Hay mucho descontento con el actual equipo de gobierno, por su gestión y por la forma con la que se ha hecho con la alcaldía. Es un síntoma de que las cosas van a cambiar, de que deben cambiar. Estamos todos muy motivados. Por dos veces han impedido que el PP recupere la alcaldía de Castelldefels, pero a la tercera va a ir la vencida. Está claro que somos los favoritos, los preferidos por los ciudadanos, pero nos hace falta el empujón final.
Eso significa arañarle votos al resto de formaciones políticas...
Tenemos que aglutinar todo el voto para que no acabe beneficiando a terceros. No puede volver a pasar como en 2019, que 271 vecinos votaron a VOX y esos no sirvieron para nada, ni consiguieron que los suyos entraran en el ayuntamiento ni ayudaron al PP, que solo necesitaba 92 votos más para conseguir un concejal que al final acabó llevándose Junts. Si no queremos que se repita ese escenario si no queremos que todos esos votos caigan en saco roto, lo mejor es aglutinarlos.
Pero es posible que algunas de las nuevas formaciones que se presentan el 28M (escisiones del PSC y de Movem o evoluciones del PDeCAT) obtengan representación y puedan ser claves en un futuro gobierno municipal.
Primero tienen que hablar los vecinos en las urnas, todo lo demás es especular. Son los votantes los que han de ponderar todas las opciones y votar con responsabilidad. Primero tienen que hablar las urnas. Nosotros salimos a ganar, como en las elecciones anteriores, pero con el bagaje de que defendemos un proyecto en el que llevamos trabajando ocho años desde la oposición, trabajando codo con codo con las entidades, con los clubs, con los vecinos, para que todo lo que Castelldefels necesita se pueda poner en valor. Pero para conseguir eso hay que tener la mayoría suficiente.
Pero la mayoría puede depender del apoyo de otros.
Siempre que te has de sentar con otros a negociar un gobierno tienes que renunciar a cosas. Negociar es renunciar y nosotros no queremos renunciar a nuestro programa. Evidentemente, si no llegamos a la mayoría absoluta nos sentaremos a hablar con todo el mundo y podríamos llegar a acuerdos en base a programas. Pero el primer escenario con el que trabajamos es conseguir la mayoría absoluta.
¿Hay optimismo en el PP? ¿Se puede lograr esa mayoría absoluta que tanto se ansía cuando se teme que suba la abstención debido al descontento general de la ciudadanía con la política y con los políticos, debido a esa desafección con todo lo que huele a política?
Yo veo a los vecinos de Castelldefels muy motivados. Y animo a todo el mundo a ir a votar, sobre todo si no queremos que las cosas sigan como están. Está claro que si no vamos a votar no va a cambiar nada. En las caras de la gente veo ganas de cambio, pero para que ese cambio llegue hay que ir a votar.
Fichando a los exconcejales de Ciutadans Guillermo Massana (número 5) y Cristina Corona (Número 10), para la lista del PP, ¿intentas atraer a los votantes de CS ahora que parece que la formación naranja está en declive? ¿Es una maniobra para asegurar esa mayoría absoluta que persigues?
Mi proyecto va más allá de las siglas. Se trata de aglutinar el voto y construir una mayoría fuerte en Castelldefels con un proyecto común: crecer como una ciudad cosmopolita, abierta, que dé oportunidades de empleo y de vivienda a todo el mundo, también a los jóvenes. Y pagando los impuestos justos.
Pero estamos hablando de la incorporación al PP del que era hasta hace unas semanas el alcaldable de Ciudadanos.
Todas las personas que se han sumado a nuestro proyecto comparten nuestros valores. Por ejemplo, hemos incorporado para cerrar la lista (número 25) a Mariano Gomà, ex presidente de Societat Civil Catalana (SCC) y presidente de Foro España, que vivie en la ciudad. Insisto. No se trata de siglas. Se trata de que la gente se sienta más cómoda con nuestra lista y la acabe votando, porque es a Manu Reyes a quien quieren de alcalde, porque tiene al mejor equipo.
¿Y por qué tiene al mejor equipo?
Porque todos sus componentes están muy involucrados, muy implicados con el proyecto y además están muy preparados y atesoran mucha formación y mucha experiencia, no solo en la administración pública, también en el sector privado. Son personas que en cualquier empresa ocuparían un buen cargo. No pueden decir lo mismo muchos dirigentes del equipo de gobierno de Castelldefels, que si no estuvieran un puesto garantizado en el ayuntamiento tendrían dificultades para encontrar empleo. El equipo de Manu Reyes tiene vocación de servicio y experiencia contrastada. Otros no. Y además tenemos buenas propuestas.
¿Cuáles son esas propuestas?
Propongo que Castelldefels se convierta en una ciudad que apueste por la calidad de vida. No se trata de ir sumando habitantes sin ton ni son, sino que construyamos una ciudad equilibrada, respetuosa con el medio ambiente. Una ciudad mejor. Venimos de un gobierno que ha ido destruyendo árboles a diestro y siniestro, que ha despilfarrado 11 millones de euros en unas obras de la avenida constitución que han hecho desaparecer 400 plazas de aparcamiento, en contra de la opinión de los vecinos. Pero, sobre todo, ciudad más limpia y más segura, porque las calles nunca han estado tan sucias como ahora ni tampoco ha habido tanta inseguridad.
Y rebajando impuestos.
Se tienen que pagar los impuestos justos, porque eso incentiva que se creen nuevas empresas y nuevas oportunidades de empleo, nuevas oportunidades para los jóvenes y posibilidades para que estos puedan acceder a una vivienda. Eso sin olvidar a la gente mayor, que necesita equipamientos y servicios en todos los barrios, que necesita ayudas.
¿Por qué en Castelldefels ha cuajado un voto mayoritario al PP y en el resto del área metropolitana (excepto también en Badalona) no y se mantienen el tradicional apoyo masivo al PSC?
La gente cuando prueba un gobierno del PP repite, ha pasado en Castelldefels y ha pasado también en Badalona (con Xavier García Albiol). Por eso el PSC siempre intenta buscar cualquier tipo de pactos, aunque sean anti-naturales: para que no gobernemos. Todo vale. Porque saben que, si volvemos a gobernar, nos consolidaremos y eso hará que todo el entorno metropolitano se vuelva más favorable al PP. Es por eso que siempre intentan frenarnos en seco, impedir que gobernemos las alcaldías que hemos ganado y sacarnos de las instituciones.
Pero el PP parece duro de pelar, al menos en Castelldefels y Badalona.
Sí. Nos henos mantenido. Incluso estoy convencido de que vamos a recuperar fuerza en muchos ayuntamientos metropolitanos y vamos a ser decisivos y a estar presentes en varios gobiernos municipales.
¿Dónde se espera que el PP sea decisivo el 28M?
Hay esperanzas de que pueda ser decisivo en el Ayuntamiento de Barcelona. Se están publicando diferentes encuestas y cada día dan a un alcalde diferente. Pero lo único que no cambia en todas ellas es que el PP es el único partido constitucionalista que obtendrá representación y el que más crece. Y todavía está por ver que qué pasa en estas dos semanas de campaña electoral.
¿Cuál es tu principal rival?
Por lo que se desprende de las encuestas publicadas hasta ahora, todos los partidos que forman parte del gobierno de Castelldefels obtienen resultados muy parecidos, muy equilibrados y todos a la baja. Está todo muy difuminado. No veo ningún adversario claro porque todos pierden.
En Castelldefels, ¿la campaña electoral puede ser la clave para alcanzar la mayoría absoluta?
Puede influir, pero no lo es todo. Una campaña de verdad, una campaña seria ha de ser permanente no basta con tres meses o con dos semanas. En el PP de Castelldefels llevamos ocho años escuchando a la ciudadanía, la única diferencia ahora (en campaña electoral) es que ese apoyo que llevamos tanto tiempo recabando hay que hacerlo cristalizar en forma de votos, hay que hacer que ese voto sea útil. El trabajo se ha de hacer antes del examen. No se pude estudiar solo la víspera. Hay que estudiar todos los días. Y dar un acelerón el último día.
Y con ese último acelerón, ¿Te ves como el próximo alcalde?
Me veo donde me pongan los vecinos. Pero voy a luchar por serlo.