El Parlament de Cataluña ha aprobado una moción que impide la ampliación de la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) del Delta del Llobregat. Los agricultores han plaudido la decisión porque argumentan que esta ampliación arruinaría la industria agroalimentaria. La moción también insta al Govern de la Generalitat a modernizar las explotaciones agrarias y a proteger el medio ambiente. El Ayuntamiento de Gavà ha aprobado una resolución similar en defensa de la agricultura local.
El pleno del Parlamento de Cataluña ha aprobado este jueves una moción presentada por el PSC que impide la ampliación de la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) del Delta del Llobregat, prevista por la Generalitat de Cataluña, a petición de la Conselleria d’Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural (controlada por ERC) y apuesta por la modernización de las explotaciones agrarias. De prosperar la ampliación supondría “la ruina para la industria agroalimentaria del Baix Llobregat”, según coinciden en vaticinar la práctica totalidad de los agricultores del Parc Agrari. La moción ha contado con el apoyo de Junts per Catalunya (que ha transaccionado el texto con los socialistas), PP, Ciutadans y Vox.
Aunque la aprobación de la moción no supone la paralización inmediata de la ampliación de la ZEPA (eso es una competencia única del Govern), sí que puede definirse como una victoria moral de los payeses porque “pene en evidencia la inexistencia de un plan de gestión de las actuales zonas protegidas” lo que es incongruente con desarrollarlas más todavía y sin la aportación de recursos. El sector agrícola cuenta con el apoyo de los consistorios locales. De hecho, el pasado mes de marzo, la comisión de Agricultura del Parlament ya rechazó el proyecto de ampliación con los votos a favor de Junts per Catalunya, PSC, Ciutadans y VOX y los payeses del Baix pidirron la inmediata retirada del proyecto
Ahora toda la presión es para el President de la Generalitat, Pere Aragonès (ERC), porque tiene la pelota en su tejado y debe mover ficha si no quiere quedar todavía más retratado ante la opinión pública. “El Govern tendrá que retirar su propuesta de ampliación de la ZEPA y alcanzar un consenso mayoritario”, aseguran desde el Institut Agrícola Català de Sant Isidre, principal representante de los agricultores del Delta.
Hacia una agricultura moderna
Desde el Institut se ha aplaudido la decisión del Parlament porque “obliga (al Govern) a realizar las inversiones necesarias para proteger el medio ambiente y los espacios naturales del Delta”, pero a la vez debe apostar decididamente por “impulsar las explotaciones agroalimentarias hacia una agricultura moderna, implementando la última tecnología y las técnicas productivas más óptimas para ser competitiva”, sostienen los payeses. Dar este paso acarreará, inevitablemente, modificar la obsoleta normativa actual del Parc Agrari, una viaja reivindicación de los empresarios agrícolas de la comarca.
El presidente del Institut Agrícola Català de Sant Isidre, Baldiri Ros, ha subrayado que la moción aprobada por el Parlament “pone de manifiesto que (los agricultores) teníamos razón cuando afirmaban que el crecimiento económico de la industria agrícola y la protección ambiental son compatibles”, y además deja al descubierto que “la ampliación de la ZEPA no era ni es ninguna solución”, ha recalcado Ros.
Delimitación imposible
El presidente del Institut de Sant Isidre ha destacado que la decisión del Parlament “enmienda la gestión de la Consellería d’Acció Climàtica, que tendrá que archivar su propuesta de ampliación de la ZEPA”. Además, ha indicado Baldiri Ros, la Generalitat “no podrá aprobar otra delimitación de la ZEPA (diferente a la vigente) si no se ha constituido la mesa de trabajo que tiene este objeto, y si no se ha logrado un consenso mayoritario sobre el tema”.
La moción exige a Acció Climàtica la convocatoria urgente en un plazo máximo de 15 días de las tres mesas de trabajo que el Govern se comprometió a constituir: una para la delimitación de la ZEPA, otra para la mejora de las infraestructuras hidráulicas y de desagüe de la zona cultivable, y una tercera para revisar la normativa del Parc Agrari de Baix Llobregat, en colaboración con las administraciones con competencia urbanística y “ con la participación de las organizaciones empresariales agroalimentarias”, ha recalcado Ros.
Por una gestión eficaz
Tal y como exigían las cooperativas agrarias de la comarca (y el propio Institut de Sant Isidre), la moción aprobada insta a la Generalitat a “elaborar, de forma urgente y preferente, el Plan Especial de Protección del Medio natural y del Paisaje de las actuales ZEPA del Delta del Llobregat”, una herramienta que permitirá “con una gestión eficaz, evitar una nueva ampliación de la ZEPA”, ha confirmado el presidente del instituto agrícola.
Asimismo, la moción aprueba el desembolso de las inversiones necesarias para “conseguir que las zonas agrícolas no queden inundadas más de 24 horas por una lluvia con periodo de retorno de diez años, incrementando la capacidad de drenaje y la capacidad de laminado del territorio, sin perjudicar a las actividades económicas existentes”, ha explicado Baldiri Ros. Esta decisión incluye “la priorización de las actuaciones, un calendario de ejecución y un presupuesto anual adecuado y suficiente para llevarlas a cabo”, ha advertido el dirigente del Institut.
Gavà se suma
Por otro lado, el Ayuntamiento de Gavà (a propuesta también del PSC y de Junts per Catalunya), ha aprobado una resolución similar en defensa de la agricultura de proximidad, con el apoyo de PP y Vox y, curiosamente, también de ERC. Además, está previsto que en los próximos plenarios municipales los ayuntamientos de Sant Boi y Viladecans aprueben textos similares en las próximas sesiones.