El Ministerio de Fomento ya trabaja para reabrir el ramal de acceso a Sant Boi desde la C-245, una vía que había sido cortada en un sentido por las obras –todavía paralizadas- de la variante que tiene que conectar la C-32 con la Ronda Litoral. Así lo ha confirmado hoy el Ayuntamiento de Sant Boi tal y como El Llobregat avanzó en la última edición impresa, ante la necesidad de volver a adjudicar las obras de la variante. A la espera de este proceso, que sigue sin calendario y que puede alargarse, mínimo, un año, esta medida mejorará la movilidad de la zona.
De hecho, era una de las dos demandas exigidas por los cuatro Ayuntamientos afectados por la paralización de las obras –Sant Boi, Santa Coloma de Cervellò, Sant Vicenç dels Horts y Torrelles de Llobregat-; la Diputación de Barcelona y la Generalitat, a través de la conselleria de Territori i Sostenibilitat. La segunda, en la que ya trabajan también Fomento y Diputación, es el desdoblamiento del ramal de conexión entre la BV-2002 y la autovía A2, a la altura de Sant Vicenç dels Horts.
Tras dos años de obras paradas, el último escollo –justo cuando se iban a reiniciar la actividad- fue la entrada en pre concurso de acreedores de la compañía. Tras varios encuentros personales entre instituciones e intercambio de misivas, el inmovilismo de Fomento iba a dar paso a la movilización del mundo local en la zona a modo de ultimátum, algo que de momento queda a la espera tras las últimas novedades.
En concreto, según los planes del Ministerio, las obras durarán un máximo de dos meses y tendrán una incidencia muy puntual en el tráfico. De esta manera, de cumplirse los plazos, el vial se abrirá para mediados de diciembre. En este tiempo, no solo se necesita retirar los conocidos ‘new jerseys’ que evitan el paso en un sentido de la vía, sino que se tienen que anivelar los carriles y acondicionarlos debido al mal estado que se encontraban por la paralización de las obras.