Solidarios

“Tengo asignadas a dos personas: una en silla de ruedas y otra con depresión severa. Las llevo a pasear por Sitges para que vean a sus vecinos y sacarles de la rutina y estimular sensaciones. El otro día hice una broma a la persona con depresión y me sonrió: fue como ganar una Champions, me sentí útil”. Este es el testimonio de José Mauri, uno de los 159 vecinos del Baix Llobregat que forma parte de la Asociación de Voluntarios de ‘la Caixa’, impulsada por CaixaBank y la Fundación Bancaria ‘la Caixa’.

José hace aproximadamente un lustro que dedica una parte de su tiempo libre a los demás, a través de diversas actividades con niños en riesgo de exclusión social o personas de edad avanzada, entre otras. Es de Castelldefels, trabaja en CaixaBank y, además de colaborar en la logística de Cáritas en esta localidad, como voluntario de la Asociación realiza actividades deportivas con niños y niñas en Barcelona y hace acompañamiento a personas de edad avanzada y con problemas de salud en Sitges y Barcelona. “En general hay un denominador común, ya que se trata de personas que necesitan amor, y eso es lo que me atrae: puedes darles algo que tú tienes y ellos necesitan”, afirma José a El Llobregat.

En lo que va de año, la Asociación ha llevado a cabo en la comarca un total de 9 actividades, de las que han salido beneficiadas 567 personas a lo largo de 44,5 horas de voluntariado. Se trata de una cifra que supera con creces a la global del año pasado, en el que se realizaron 5 actividades con 39 beneficiarios y 40 horas.

Se trata de acciones que se organizan en colaboración tanto con entidades grandes como con otras más pequeñas, explica Marta Gil, coordinadora del departamento de Voluntariado de la Fundación La Caixa. “Llevamos a cabo actividades puntuales y otras ya consolidadas”, asegura Gil, que destaca las que se organizan como refuerzo educativo y de acompañamiento a personas con discapacidad.

Para detectar las necesidades de cada territorio, el programa de Voluntariado está permanentemente en contacto con entidades sociales y ayuntamientos, que son los que conocen las problemáticas específicas de cada zona. En este proceso, la Asociación de Voluntarios de ‘la Caixa’ pone a disposición del programa de voluntariado corporativo a los más de 11.000 voluntarios que trabajan por una sociedad mejor, más de la mitad de los cuales –en concreto el 55%- son empleados del grupo ‘la Caixa’. El 25% son trabajadores de la entidad en proceso de prejubilación o ya jubilados, mientras que el 25% restante son amigos, familiares y clientes. “Les damos la posibilidad de canalizar su solidaridad”, defiende Gil sobre un perfil de voluntarios que quieren que crezca en el futuro. En este sentido, CaixaBank, dentro de su programa de Banca Socialmente Responsable, ofrece a sus empleados la posibilidad de realizar actividades de voluntariado durante la Semana Social, que cuenta con la colaboración de la Asociación de Voluntarios.

De esta manera también se pronuncia José, que cree que hay una “solidaridad escondida y latente que hay que despertar”. “Hay mucha gente que desde el anonimato tiene ganas de colaborar”, considera.

Una experiencia positiva
Mientras tanto, los trabajadores siguen llevando el peso del voluntariado. Es el caso de María del Mar Vicente, empleada de CaixaBank que lleva un año de voluntaria en el Hospital Residencia Sant Camil de Sant Pere de Ribes. Su tarea la lleva a cabo en las plantas de enfermos de larga duración. Una experiencia que, según explica a esta publicación, hace “tomar consciencia” que algún día cada uno de nosotros alcanzará la vejez. “Una vivencia como esta te ayuda a relativizar y a disfrutar de cada segundo de la vida”, celebra María del Mar.

Una sensación que comparte José, que destaca el aprendizaje que saca de ser voluntario, sobre todo en lo referente a las relaciones sociales. “Hay que ir de menos a más, yo tomo una distancia prudencial hasta que veo que la relación con la persona que ayudas es óptima como para tener sinergias positivas”, explica José.

En general, no obstante, ambos voluntarios coinciden en que trabajan con gente “muy agradecida” y aseguran que seguirán colaborando en este programa solidario.